Un juzgado de Palma ampara a los novios que no pudieron casarse por la pandemia

Sin embargo se toparon con la empresa de cátering que se negó a aplazar la fecha sin más o a devolver el dinero. María explica que sólo les dieron como opciones aplazar la boda a la misma fecha un año después pero añadiendo otros tres mil euros al pago de la reserva que habían adelantado, que era de dos mil euros. Ante una nueva cancelación, la empresa advertía de que la pareja perdía todo el depósito de 5.000 euros. No hubo acuerdo para encontrar otra fecha y la pareja ahora sigue sin saber cuándo se casará. «Queremos esperar a que pase toda la pandemia», explica Manuel.

Noticias relacionadas

Dificultades para vacunar de COVID: «La percepción de riesgo ha bajado»

Más noticias relacionadas

Ante la falta de acuerdo para acomodar la celebración, los novios pidieron la devolución del depósito. La empresa se negó a devolver el dinero y el asunto terminó en una demanda judicial. Ahora, un juzgado de Primera Instancia de Palma ha condenado a la empresa a la devolución íntegra de la reserva. La sentencia aplica la misma legislación que opera para todos los contratos de servicios que se vieron afectados por el COVID, como los billetes aéreos: en caso de que se tengan que suspender el contrato el consumidor tiene derecho a la devolución del dinero.

Consumidor

El juez admite que a pesar de lo «confuso» de la redacción del decreto especial que aprobó el Gobierno, la decisión última queda en manos del consumidor. «La negativa a las propuestas presentadas o la falta de acuerdo lleva necesariamente a la resolución del contrato con la devolución de los importes entregados en concepto de reserva».

La resolución repasa las distintas alternativas que se ofrecieron a la pareja y los correos electrónicos que cruzaron con la empresa que iba a servir el menú del banquete.