En los últimos días se ha acentuado la cancelación de reservas. | Click

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Muchas empresas de Mallorca han optado por posponer las cenas de Navidad por prudencia hasta mediados de enero, fecha en la que se espera que los niveles de contagios estén más controlados y la actividad en la hostelería vuelva a la normalidad, según señalan restaurantes y hoteles afectados por esta anulaciones de reservas. «Hemos considerado oportuno actuar con criterio y ante la actual coyuntura de contagios en la Isla, según nuestros comités de crisis, se ha optado por cancelar el día previsto y posponer las comidas y cenas para el próximo año», indicaban ayer desde varias cadenas hoteleras.

Restauradores de CAEB y PIMEM muestran su preocupación por la evolución de los acontecimientos en la última semana: «Es cierto que se han cancelado comidas y cenas, principalmente a partir de mediados de la próxima semana. También es verdad que alguna empresa ha adelantado para estos días la comida navideña para evitar problemas. Los restauradores estamos aplicando todos los protocolos sanitarios impuestos por Salut y el Govern a rajatabla, tanto es así que restaurantes con capacidad para menos de 50 personas están pidiendo el certificado sanitario de doble vacunación por precaución y concienciar de este modo a los clientes de que se deben adoptar todas las medidas de precaución».

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De momento, el Govern no ha endurecido los criterios para acceder a los restaurantes, bares y cafeterías, pero no se descarta que si en los próximos días los niveles de incidencia de contagios sigan subiendo estudie la conveniencia de hacerlo. Los hoteles que tenían reservadas cenas de empresa, por su parte, han visto como desde el jueves se ha producido un rosario de anulaciones «aunque es cierto que los organizadores de estos eventos han pedido un aplazamiento hasta mediados de enero. Muchos eventos se han pospuesto para Sant Sebastià, a la espera de que mejoren las actuales condiciones sanitarias», apuntaban ayer desde varios establecimientos.

Tanto hoteleros como restaurantes coinciden en señalar en que la campaña de Navidad se ha visto afectada negativamente, cuando todas las previsiones eran muy optimistas a principios de diciembre. Otro de los sectores que han visto mermada su actividad por el mismo motivo son las empresas de cátering, cuyos departamentos comerciales reciben cada día anulaciones de eventos y aplazamientos para el próximo año.