El Consejo de Ministros aprobó el martes la medida de gracia. En la imagen la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. | J.J.Guillen

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Un indulto evita que una mujer condenada en Palma hace diez años tenga que ingresar en prisión por un delito cometido en 2010. El Consejo de Ministros aprobó el martes la medida de gracia respecto a una condenada a una pena de siete meses de prisión tras participar en una agresión hace más de una década. El acuerdo supone que se conmuta la condena de ingreso en la cárcel por siete meses de trabajos en beneficio de la comunidad. El Real Decreto que contiene el indulto impone la condición de que el perdón se revocará si, en el plazo de un año, la condenada comete otro delito doloso.

La medida de gracia contaba con el apoyo de la Fiscalía y del juzgado que dictó la condena. Ambos órganos dictaminaron a favor del indulto. Se valoró el tiempo pasado desde los hechos y de la condena, que no fue ejecutada en su momento y que tenía que hacerse efectiva ahora. De esta manera, la medida evita el ingreso en prisión de la condenada cuando sus circunstancias vitales habían cambiado de forma notable después de los hechos que motivaron su juicio y condena.

En la misma sesión, el Consejo de Ministros aprobó otros nueve indultos por otras condenas en otros territorios. Las medidas de gracia han tenido un leve repunte en el último año, cuando el Ejecutivo ha concedido cerca de medio centenar, pero siguen lejos de las cifras de hace unas décadas cuando eran mucho más frecuentes. El anterior indulto que afectaba a un condenado en Mallorca fue otorgado el año pasado y también evitó el ingreso en prisión de un médico condenado por revelación de secretos.