La asociación de vecinos de Es Pil·larí ha presentdo alegaciones al PGOU. | D. LADARIA

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Los vecinos de Es Pil·larí critican que el nuevo Plan General de Palma no sólo no soluciona los problemas que viene arrastrando la barriada desde hace años, como la falta de accesos al núcleo urbano o itinerarios para viandantes, sino que los agrava ya que, entre otras cosas, deja edificaciones fuera del núcleo urbano mientras permite el crecimiento hacia zonas declaradas húmedas atentando contra el paisaje.

Así se recoge en las alegaciones que ha presentado la Asociación de Vecinos de la zona al texto que ordena su desarrollo urbanístico. El escrito, firmado el 14 de febrero, comienza detallando los problemas que arrastra la barriada desde hace años, concretamente apuntan desde que en 1985 se construyó la autopista, y que han supuesto 35 años «de agonía para el pueblo».

Según enumeran, tras esa circunstancia, en Es Pil·larí se han ido quedando sin comercios, no cuenta ni con centro de salud, sólo con una unidad básica que abre cuatro días a la semana, ni con Casal de Barrio, ni club para mayores y, además, la comunicación y el servicio de transporte público es «deficiente». Todo ello les lleva a afirmar que la zona va camino «de una muerte anunciada y acelerada por la inanición de las instituciones».

A continuación el escrito de alegaciones detalla las, según su opinión, mejoras que son necesarias en el barrio y comienzan por solicitar la apertura de las calles Martina Pascual y Josep Tomás de Renteria hasta la carretera de las Maravillas, tanto para el tránsito rodado como para paseantes y ciclistas tal y como recogía el PGOU inicial de 1995 y que no aparece en la aprobación de 1998, «por intereses que desconocemos». Consideran que el núcleo tiene déficit de entradas y salidas y que, abriéndolas, se paliaría el aislamiento. Los vecinos, asimismo, recuerdan que el plan no resuelve los casos de inmuebles actualmente fuera del ordenación y que no disponen de ningún servicio, «son considerados rústicos a pesar de ser parte de Es Pil·larí original», señalan.

La falta de movilidad, y de una solución en el texto, ocupa una parte importante de los argumentos en contra de la propuesta del Ajuntament. La Asociación critica que las aceras no cumplen la normativa, ya que miden menos de los 1,8 metros que marcan las ordenanzas. También piden un puente «seguro» para cruzar la autopista hasta la Platja de Palma ya que, señalan, «la autopista nos conecta con Ciutat pero nos aísla del entorno» y una ronda para viandantes desde la autopista hasta la carretera de las Maravillas.

La asociación apunta que el PGOU apuesta por reducir el uso del coche pero señala que «no todo el mundo puede vivir en la ciudad de los 15 minutos de la que habla». En este sentido remarcan que su barrio está a 10 kilómetros del centro de Palma, reiteran que tienen un «pésimo» servicio de la EMT y recuerdan, de hecho, que ya en época de pandemia reunieron 1.800 firmas para reclamar más frecuencias.

Respecto al entorno natural, las alegaciones vecinales cuestionan que se haya permitido una nueva urbanización de 500 viviendas, «la mayoría de protección oficial y que ha cambiado radicalmente la fisonomía del núcleo con la correspondiente pérdida de paisaje» y que, además, denuncian, se han construido en zona de riesgo de inundación. Por último, solicitan la conservación «al 100 %» de la zona húmeda de Ses Fontanelles «adoptando las medidas necesarias para evitar la urbanización y garantizar su preservación».

El apunte

Un particular también presenta alegaciones al plan

El contenido del plan para la zona también ha recibido alegaciones de un particular. En este caso Xus Sastre ha presentado un escrito en el que recuerda que el Consell Insular está tramitando, ahora está en periodo de alegaciones, la tercera revisión del su Plan Territorial y al tratarse de una norma superior, “Cort podría haber esperado unos meses, en vez de pensar en clave electoralista, y haber coordinado ambos planteamientos».