Todo el dinero que consigan irá destinado a finalizar las obras de un centro de salud en Missirah, un pueblo del distrito de Toubacouta (Senegal). Esta construcción forma parte de su proyecto ADAMA de Cooperación Internacional en el país. El presupuesto aproximado ronda los 80.000 euros y esperan que esté listo a principios de 2023. «La idea de esta subasta solidaria surge con el fin de cubrir los gastos. Allí están ahora mismo cuatro arquitectos supervisando la infraestructura», explica el presidente de la Fundación, Alfonso Jaume.
Hasta la fecha, hay alrededor de 30 artistas de la Isla que se han presentado a este evento para donar sus creaciones. «Habrá de todo, tanto artistas consagrados como menos profesionales. Será algo rocambolesco», expresa ilusionado. No es la primera vez que montan un evento así. Hace años prepararon algo parecido y «tuvo mucho éxito».
Centro de salud
El proyecto del centro de salud comenzó en 2018 con la construcción de una primera parte muy equipado. Aquí trabajará un equipo multidisciplinar de voluntarios, desde dentistas, protesistas hasta educadores y otros perfiles. «En la región donde se encuentra Missirah, Fatick, habitan alrededor de 9.000 personas pero a este centro de salud nos llegan de todas partes», manifiesta Alfonso Jaume.
La nueva estructura constará de una clínica, laboratorio, prótesis dental, sala de rayos X, sala de espera así como cocina, baños y almacén. Cada año, centenares de voluntarios de todo el mundo, pero sobre todo a nivel estatal y regional, colaboran con esta Fundación. La estancia mínima para cada voluntario es de 15 días y se intenta que el centro de salud no quede sin refuerzo.
En Senegal, los recursos son «muy limitados». Alfonso Jaume explica que con este refuerzo sanitario que hacen en la zona desde 2007 (con distintos proyectos en marcha) han podido cambiar mucho la vida de los ciudadanos de la región. «La gente es encantadora. Desde un principio nos quisieron ceder un terreno para construir este centro. Somos hijos ilustres. Yo te diré que conozco más a la gente de Missirah que a la de Pollença», bromea el presidente de la Fundación.
Entre los tratamientos más comunes que realizan destacan las extracciones. A pesar de todo, Alfonso es consciente del gran trabajo que hace el equipo de especialistas para crear las prótesis. Algo, dice, «complicado» por las condiciones y la falta de equipamiento. Desde la Fundación hacen un «llamamiento a la población balear» a que puedan participar en la exposición y posterior subasta.
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