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El PSIB y la oposición, formada por el PP, Ciudadanos, El Pi y Vox, han rechazado este jueves en el pleno que el Consell de Mallorca pida al Estado y al Govern que restrinjan la compra de viviendas a quien no lleve dos años viviendo en la isla. Los mismos partidos también han votado en contra de la propuesta que ha hecho Podemos (socio de los socialistas en el gobierno insular) para redefinir qué es un gran tenedor. Los morados planteaban rebajar de 10 a cinco el número de viviendas en propiedad para ser considerado un gran tenedor.

«Hemos acercado posiciones, pero no hemos llegado a un acuerdo», ha confesado el conseller del PSIB, Javier Pasquet, porque a lo largo de la mañana han negociado la moción con Podemos. «Votamos en contra convencidos de que podremos llegar a un consenso en los próximos meses», ha añadido. Cabe decir que las medias incluidas en la moción presentada en el pleno solamente son peticiones porque la institución insular no puede regular las cuestiones de vivienda, que son competencia estatal.

Los socialistas, en cambio, sí que han votado a favor de que el Consell inste al Estado y al Govern a negociar que la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) para que, tanto las viviendas que gestiona como el suelo urbanizable del que dispone, se destinen a vivienda pública en alquiler social. Asimismo, el PSIB ha validado que también se solicite que la nueva ley estatal de vivienda declare Balears como zona tensionada, lo que permitiría regular el precio del alquiler cuando se apruebe la normativa estatal.

La vicepresidenta del Consell, Aurora Ribot, ha defendido la moción como representante de Podemos: «Queremos fomentar la compra de viviendas entre la gente que está enraizada a la isla, independientemente de su origen», ha defendido ante las críticas del portavoz del PP, Llorenç Galmés, que considera «xenófobo» y «racista» el planteamiento de restringir la compra a los que no lleven dos años empadronados.

La representante de Ciudadanos, Beatriz Camiña, ha calificado la moción como hipócrita, acusando a Ribot de que en su partido hay personas que tienen más de cinco viviendas en propiedad. Además, ha lamentado que Podemos «no quiera que según qué extranjeros vivan en nuestra sociedad».

En este sentido, el conseller de Més Joan Llodrà, ha recordado que la limitación de compra ya existe en Dinamarca y Malta. Cabe decir que, pese a formar parte de la Unión Europea, aplicaron la mediada antes de ingresar como miembros. De hecho, la misma presidenta del Consell, Catalina Cladera, ha explicado esto mismo en el pleno, pero horas antes del debate de la moción.