La bonanza meteorológica invitó ayer a tomar el sol e incluso a darse un chapuzón. | Teresa Ayuga

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Baleares celebrará este lunes el Día Internacional del Cambio Climático con evidencias claras de que algo pasando en la meteorología. Este fin de semana se han vuelto a vivir noches de calor tropical en municipios de la Serra de Tramuntana –en Banyalbufar se contabilizaron 28 grados a las 06.00 de la mañana de ayer– y las temperaturas alcanzaron los 30 grados en algunos puntos de las Islas. Todo esto en unas fechas en las que las chaquetas deberían estar ya fuera de los armarios y los ventiladores, en los trasteros.

El Día Internacional de Cambio Climático llega en esta edición con más motivos que nunca para reflexionar sobre los efectos los efectos nocivos y devastadores del cambio climático en el planeta. Baleares sigue inmersa de lleno en el llamado veroño, es decir, temperaturas de verano en pleno otoño.

Las playas volvieron a reunir este domingo a numerosos ciudadanos deseosos de disfrutar del que puede ser el último domingo de verano en otoño, con el añadido de que la presión turística no tiene comparación a la vivida en julio y agosto. Y atención a otro hecho que anticipa el invierno: el cambio de hora llega este fin de semana.