Hasel (i) y Valtònyc, dos raperos condenados por el contenido de sus letras. | Redacción Digital

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El rapero catalán Pablo Hasel ha cumplido este jueves dos años en prisión, y otro rapero contestatario con el poder establecido como es el mallorquín Valtònyc no ha dejado pasar de largo la efeméride para recordarlo. «Dos anys empresonat, dos anys dempeus» escribe Josep Miquel Arenas en un mensaje en Twitter que ha recibido numerosas respuestas de los usuarios.

Algunos medios de comunicación catalanes señalan en este día la «anomalía de un rapero encarcelado en Europa» por el contenido de sus canciones, recordando que en estos veinticuatro meses transcurridos desde que Hasel fue apresado en el rectorado de la Universitat de Lleida y conducido a la cárcel no se ha producido ni el indulto del cantante y activista, ni tampoco la reforma de las leyes que se activan al respecto de manifestaciones artísticas o libres expresiones de conciencia u opinión.

Algunas fuentes señalan que, tanto en el caso de Hasel como de Valtònyc, las interpretaciones del enaltecimiento del terrorismo producen situaciones difíciles de hallar de forma análoga en países de nuestro entorno.

«No hay suficientes barrotes para apagar tu voz ni las ganas de cambiar este mundo. Gracias por enseñarnos tanto y discúlpanos por no estar a la altura que requiere la injusticia que sufres. Deseo abrazarte pronto en libertad» ha escrito el mallorquín. En la fotografía compartida, tomada hace unos años, el rapero catalán porta una camiseta que pide «amnistía» y «libertad» para los «presos políticos».

Valtònyc se halla evadido de la acción de la justicia española desde hace unos años en Bélgica, donde los tribunales hasta la fecha no han atendido las peticiones de los jueces. Uno de los hechos que lo dificulta, según fuentes jurídicas, es la inexistencia del delito de injurias a la Corona, por el cual fue condenado Valtònyc, en el ordenamiento jurídico del Estado centroeuropeo.

La sonada detención de Pablo Hasel provocó una ola general de indignación en Cataluña, protagonizada por miles de jóvenes en algunas capitales. De aquellas fechas se recuerdan las barricadas y los incendios de mobiliario urbano, así como los enfrentamientos entre manifestantes y agentes de los Mossos d'Esquadra. Hasel fue condenado a dos años y un mes de prisión, aunque la acumulación de penas por otras causas retrasarán previsiblemente su salida de la cárcel un tiempo más.