La Asociación de Usuarios Financieros aconseja la hipoteca variable: «El tipo fijo está muy caro»

El presidente de los APIS, José Miguel Artieda, y su homóloga en ASUFIN, Patricia Suárez, han formalizado el acuerdo esta mañana en la sede del Colegio. Según ha destacado Suárez, esta colaboración les brinda la oportunidad de «poder llegar a los usuarios en el momento previo» a la compra de la vivienda. Así, si bien la asociación acostumbra a prestar sus servicios cuando los usuarios lidian con problemas sobrevenidos, «nos cuesta mucho trabajo llegar al antes y por eso para nosotros es una gran suerte colaborar con la API, porque ellos están justo en el momento previo de la formalización del contrato de compra».

Así y según ha explicado, este convenio «tiene que ver con educación financiera y con prevención, con poder ayudar a diferenciar qué tipos de hipotecas hay en el mercado y por qué una es mejor que otra». La clave de esta tarea de asesoramiento va a ser, enseñar al usuario "a saber distinguir productos que se vinculan normalmente a una hipoteca, como los seguros del hogar, por ejemplo, que no son obligatorios, pero que se presentan como una ventaja: casi nunca hacen la hipoteca más barata, sino que la encarecen". Es por eso, insiste Suárez, que los clientes «tienen que saber comparar: nosotros queremos ayudarles en esa toma de decisiones, tener una relación más sana con su banco y ahorrarles problemas futuros».

Con respecto a los vaivenes del euríbor y del mercado hipotecario en los últimos tiempos, la presidenta de Asufin señala que el momento actual hace aconsejable decantarse por el tipo variable. "Para aquellos que ya tienen hipoteca y la pueden pagar, la gran duda es si cambiarse a una de tipo fijo. Durante el año pasado sí recomendábamos este cambio, pero a partir de septiembre empezaron a subir los tipos fijos y ya empezamos a desaconsejar el cambio porque ya no merecía la pena. Ahora mismo, en este momento económico, lo más aconsejable es el tipo variable porque el tipo fijo está muy caro".

Por lo que respecta a la gente con problemas para pagar la hipoteca, Suárez recomienda asesorarse correctamente de los derechos y posibilidades que tienen todos los usuarios a su alcance pero que muchas veces desconocen. «No saben que pueden llegar a un acuerdo con el banco y que éste está obligado a facilitarles una carencia, un aplazamiento, una quita e incluso una dación en pago».

Las previsiones de Asufin sobre la evolución del euríbor pasan por que se sitúe en torno al 4 % entre mayo y junio, finalice el año en un 4,5 % y descienda hasta aproximarse al 3 % en 2024. «Creo que en lo que resta de 2023 estaremos en una especia de meseta: si sube lo hará muy poco».

Sobre la cuestión de la movilización de las 50.000 viviendas de la Sareb para alquiler social -447 en Baleares- Suárez comparte la visión ya expresada por Artieda. «Nos sabe mal pero creemos que llega tarde, todas las viviendas que estaban en mejor sitio o mejores condiciones son las que primero se vendieron». En ese sentido, recuerda que la mayoría de esos activos inmobiliarios «están en zonas rurales», de manera que «solo la mitad realmente podrían ser buenas para el alquiler social». Además, muchas de esas viviendas son unifamiliares «que no son adecuadas para familias con pocos recursos», además de los inmuebles existentes que están «okupados y vandalizados».

Al respecto, Artieda remarcó que todo ese parque inmobiliario «necesitará reforma porque el producto que queda ya no es interesante». Y para ello, insiste, será necesaria la colaboración público privada.

No obstante, Suárez remarcó que «nunca es tarde si la dicha es buena»y celebró que la nueva ley de vivienda prohíba la venta de vivienda social a los fondos buitres. «No puede ser que construyamos vivienda libre con los impuestos de todos para luego entregarla a fondos buitre».