La gata Abby, en adopción, fue maltratada por su anterior dueño.

TW
6

Abby necesita una segunda oportunidad. Tras haber sido maltratada por su primer dueño, esta gata, rescatada por la asociación protectora de animales Happy Cat de Mallorca, busca un nuevo hogar tras haber pasado por un largo proceso de adaptación. Y es que esta gata noruega es diferente al resto. «Tras extirparle el ojo nos encontramos con otra característica, la menos importante en realidad, y es que, si los gatos pudiesen tener Síndrome de Down, ella lo tendría», explican las voluntarias de la asociación animalista.

A pesar de que es una dolencia que no sufren los felinos, Abby padece alguna anomalía que la gente suele confundir con esta enfermedad genética en humanos. Su historia es complicada. La minina procedía de «criador ilegal», y según lo que relatan desde la protectora «lo que nos trajeron fue algo realmente impactante, auténticos despojos, estaba en un estado deplorable». «Tuvimos que ingresarla a ella y a sus tres hermanos directamente en la clínica, a las pocas horas uno de ellos falleció de una infección interna», aseguran.

«Imaginamos que su vida anterior quedó reducida en una mísera jaula, por ser gatos que no podían venderse debido a su estado y carácter. Estaban totalmente asustados, solo se sentían seguros en sitios oscuros», cuentan. Entre los gatos rescatados estaba Abby, una hembra adulta, «pero lo que realmente encontramos fue una gata que solo mostraba auténtico terror a todo», detallan.

«Gracias a su casa de acogida ha ido superando el terror que tenía a los humanos, cogiendo confianza e incluso pidiendo caricias y, además, tolera a otra gata en la casa». Ahora, una vez recuperada, buscan una familia definitiva para Abby. Las voluntarias informan de que está castrada y testada de inmunodeficiencia y leucemia felina (negativa en ambas), tiene las vacunas al día y está desparasitada, quien quiera darle un hogar, tan solo necesitaría hacer el cambio de titular del microchip.

Abby tuvo que se operada de uno de los ojos.

Ley de Bienestar Animal focaliza en la camadas de gatos

Las camadas no deseadas de gatos son uno de los principales motivos de abandono animal en España, según el informe sobre abandono y adopción de perros y gatos que realiza la Fundación Affinity. Para evitarlo, la Ley de Bienestar Animal ha focalizado muchos de sus puntos en el control de la cría y la tenencia responsable de animales de compañía, especialmente la de los felinos. De hecho, una de las nuevas normas consiste en que los tutores de gatos tendrán que castrarlos antes de que cumplan los seis meses, exceptuando aquellos que formen parte como animales reproductores en el Registro de Criadores estatal que la misma normativa quiere poner en marcha. Con esto, se pretende tener un mayor control sobre qué personas se dedican a la actividad de la cría.