De izquierda a derecha, la directora en funciones del IBDONA, Maria Durán; la consellera de Presidència, Funció Pública i Igualtat en funciones, Mercedes Garrido; la presidenta insular, Catalina Cladera; el conseller de Presidència en funciones del Consell, Javier de Juan y la directora insular de Igualtat en funciones, Rosa Cursach. | Jordi Vila

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Mallorca será la primera isla de Baleares que dispondrá de un centro de crisis de atención 24 horas a víctimas de violencia sexual tras la firma de un convenio este lunes entre el Consell, el Govern y el IBDona. Aglutinará en un solo espacio los servicios de atención y acompañamiento que se están llevando a cabo entre el Consell y el Govern, es decir, atención psicológica, jurídica y social para víctimas de violencia sexual, y a los familiares y las personas del entorno de la víctima, así como atención telefónica, telemática y presencial, las 24 horas del día, cada día del año.

Se atenderán mujeres mayores de dieciséis años víctimas y supervivientes de violencia sexual, tanto si la violencia se ha producido de manera reciente como en el pasado. Para acceder, no será necesaria la interposición de una denuncia y el enfoque estará centrado en la víctima.

«Tenemos los recursos, los servicios y un convenio ya firmado disponer de un centro específico para víctimas de agresiones sexuales. Lo que ahora toca es ejecutarlo, por eso estaremos vigilantes», ha afirmado la presidenta insular en funciones, Catalina Cladera, en referencia a que pronto el PP gobernará en la institución. «Estaremos muy pendientes para que no se retroceda ni un milímetro en políticas de igualdad y atención a las mujeres y para que no se deje perder ningún recurso conseguido», ha reiterado. El Consell se ha comprometido a adquirir el espacio para alojar el centro y será quien lo gestione, mientras que el IBDona lo coordinará y los otros centros que también contempla la ley en el resto de islas.

La consellera de Presidència, Funció Pública i Igualtat en funciones, Mercedes Garrido ha explicado que el Govern aporta 800.000 euros para la creación del centro y que se distribuirán 1,5 millones de euros entre los consells insulars, atendiendo al número de denuncias o procedimientos judiciales existentes desde el año 2019 y al resultado de la macroencuesta del Ministerio de Igualdad sobre violencia sexual. El objetivo es que haya centros de crisis en funcionamiento en las cuatro islas antes del 31 de diciembre. La iniciativa se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea, Next Generation EU.