Un transeúnte mira la oferta de viviendas de una inmobiliaria de Palma. | Gemma Marchena | PALMA

TW
13

La firma de hipotecas en Baleares se desplomó un 34 % en mayo, una de las caídas más pronunciadas de España y que confirma un enfriamiento del mercado inmobiliario. Éste, sin embargo, no va a conllevar una bajada de los precios. Al menos no en las Islas: la falta de oferta mantendrá el precio de la vivienda como mínimo al mismo nivel.

Así, la bajada en el acumulado del año alcanza el 17 %, cinco puntos por encima de la media estatal, del 12 %. El Archipiélago encadena de esta manera tres meses a la baja, haciendo buenos los vaticinios del sector a finales del año pasado sobre una moderación del mercado en 2023 que no conllevaría bajada de precios: las 5.454 firmas hipotecarias han supuesto un importe de algo más de 1.800 millones de euros (una media de 343.500 euros), lo que constituye un incremento de más del 5 %.

Se trata de una tendencia que se espera continúe más o menos constante durante el ejercicio en curso. El presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Baleares y de la Asociación API-Baleares, José Miguel Artieda, entiende como plenamente esperables los datos sobre firma de hipotecas publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), dado que «cada vez hay menos producto disponible y a su vez es cada vez más complicado acceder a éste por la subida de los tipos de interés».

Esa subida de los tipos de interés es lo que ha llevado a que una hipoteca se traduzca en «unos 300 euros más que hace año y medio», subraya, un factor que, unido a la falta de suelo disponible en el territorio balear está marcando está línea a la baja de las operaciones de compraventa de vivienda. Se trata de algo que «ya se venía anunciando desde antes de la pandemia», apunta Artieda.

La tendencia al enfriamiento del mercado se vislumbraba ya en 2019, pero el lapso a todos los niveles que supuso la crisis sanitaria mandó al cajón todas las previsiones: tras la semiparalización sufrida en 2020, en 2021 se vivió un repunte inusual de las operaciones que prosiguió el año pasado, en buena parte espoleado por las compras de extranjeros.

En la misma línea que Artieda se pronuncia Francisco Iñareta, portavoz del portal inmobiliario Idealista, quien señala que los datos revelan «una corrección que sanea el sector tras un 2022 de récord». Asimismo, indica que el tipo medio de las hipotecas creció en mayo por el incremento de las fijas sobre las variables.