«Cuando llegué a la Isla, para mí era natural que hubiera dos lenguas y que el extranjero tuviera que respetarlas»

Zorana relata que se fue sola de su país tras acabar la carrera de Turismo en la University of Tourism and Management Skopje y finalizar el máster especializado en este sector. Lo hizo con la idea de internacionalizar sus estudios realizando un doctorado fuera. Y le surgió la oportunidad en la UIB. Su adaptación ha sido «muy positiva», asegura, y lo ha hecho de forma autodidacta. «Cuando llegué a Mallorca, para mí era normal que hubiera dos lenguas y que el extranjero que viene tiene que respetarlas», opina. Detalla, además, que Macedonia del Norte «es un país que comparte distintas etnias, religiones e idiomas. Estamos acostumbrados a convivir con esta variedad». Zorana habla a la perfección más de cuatro idiomas.

Pandemia y tesis

Durante el año y medio antes de que comenzara la pandemia, Zorana ya tenía preparada y acabada la parte teórica de su tesis doctoral. En ese momento, era una investigación relacionada con la internacionalización de las cadenas hoteleras mallorquinas. «Tenía preparado el desarrollo, las estrategias; había estudiado las cadenas hoteleras en profundidad, la visión y sus retos del futuro hasta 2030. Pero llegó la COVID-19 y fue imposible avanzar, hubo cero movimientos y nada de información. Todo era pánico. Así que vi mi proyecto demasiado ambicioso y arriesgado, y tenía miedo de no llegar a los resultados», rememora.

Tuvo que replantear la propuesta. «¿Cómo afrontarán esta crisis mundial las cuatro cadenas hoteleras de Mallorca?», se preguntó. Y se lanzó por esta idea. Gracias a ello, ha convertido esta propuesta en una investigación pionera. «Nadie antes había analizado las estrategias de expansión de este sector en periodo de crisis». Zorana tiene claro que quiere seguir ligada la investigación y al mundo académico.