Ovejas en los terrenos de un parque solar fotovoltaico en el municipio de Llucmajor. | ARCHIVO

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La primera sesión de la legislatura de la Ponència Tècnica d'Ordenació del Territori i Urbanisme del Consell de Mallorca trató la semana pasada informes referidos a la autorización administrativa energética, declaración de utilidad pública, tramitación ambiental y proyecto industrial estratégico de siete proyectos de parques fotovoltaicos en suelo rústico.

Las siete iniciativas (cinco en Palma una en Inca y la séptima en Sant Llorenç) suman 1,6 millones de metros cuadrados (160 hectáreas) y 303.196 paneles solares. El proyecto de Inca (Son Vivot) está diseñado para una producción energética anual de 32.293 megavatios/hora, lo que el equivale al 30 % del consumo total del municipio. Hay otro proyecto en Inca, en Binissatí Vell, que todavía no ha salido a exposición pública.

Los dos mayores se ubican en Palma, concretamente en la zona de Puntiró. Se trata de los parques fotovoltaicos Puntiró Hive I y Puntiró Hive II. El primer proyecto, el mayor, finalizó su exposición pública el pasado agosto y pide la declaración de proyecto industrial estratégico, previendo una ocupación de 476.000 metros cuadrados (47,6 hectáreas) y 114.036 paneles solares. Es el único de los proyectos tramitados por el Consell que supera los cien mil paneles. Actualmente, la finca está dedicada al cultivo de cereal y frutos secos, y cuenta con ayudas europeas.

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Puntiró Hive II también finalizó su exposición pública en agosto e, igualmente, pide la declaración de proyecto industrial estratégico, aunque le da el carácter de agrovoltaico, es decir, combina la actividad agraria y la fotovoltaica. Puntiró Hive I tiene dos empresas promotoras, compartiendo una de ellas con Puntiró Hive II, que prevé una ocupación de 438.300 hectáreas y la instalación de 85.500 paneles solares. También es una finca de uso principalmente agrario con ayudas europeas.

La concentración en Puntiró de los dos mayores parques fotovoltaicos en tramitación suponen una ocupación de 914.000 metros cuadrados (91,4 hectáreas) y 199.836 paneles solares. Es decir, sólo estos dos proyectos representan el 56 % del total de la extensión prevista en las siete iniciativas en tramitación y el 66 % de sus paneles solares.

Los otros tres proyectos de Palma se ubican en una finca situada entre s'Arenal, el aeropuerto y el Pla de Sant Jordi, Son Noguera-Son Bosch (también en s'Arenal, junto a la salida de Cala Blava de la autopista de Llucmajor) y Son Serra (cerca del Torrent de Bunyola). El proyecto de Sant Llorenç se sitúa en la finca de Son Moro.

Cabe destacar que todos los proyectos prevén medidas compensatorias por la ocupación de suelo rústico, intentando una compatibilización entre los usos energético y agrario. Estas medidas son muy variadas: desarrollo de ganaderías ovinas extensivas; pastos ecológicos; cultivo de plantas aromáticas y melíferas acompañadas de paneles de abejas; restauración y mantenimiento de molinos y acequias; plantación de almendros, olivos, algarrobos y encinas; acuerdos para poner en producción fincas ajenas que ahora no son cultivadas; riego con aguas depuradas; investigaciones sobre rendimiento agrícola en colaboración con la UIB; o plantación de vegetación de ribera en torrentes.