Turistas paseando frente a la bahía de Palma con cruceros al fondo. | M. À. Cañellas -

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Las previsiones que manejan hoteleros y aerolíneas de cara a los próximos meses están anticipando un 2024 que superará los máximos turísticos alcanzados el pasado año. Después de un 2023 de récord en materia de llegadas y gasto turístico, las lecturas iniciales que el sector está haciendo de la próxima temporada apuntan a que el turismo en España en general y en Baleares en particular continuará su tendencia al alza, con todas las ventajas e inconvenientes que ello plantea en destinos con crecientes problemas de saturación, como es el caso de las Islas.

La Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) esperaba un cierre del año con un incremento del 24 % en la actividad turística del Archipiélago, lo que se está confirmando como la antesala de un primer semestre que dejará atrás las cifras de 2023. Desde la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), se manejan datos que apuntalan estas expectativas: febrero contará con un 44 % de la planta hotelera abierta (13 puntos más que el año pasado); le seguirá un marzo con el 74 % hasta llegar al 88 % del mes de abril. El hecho de que la Semana Santa caiga en la última semana de marzo adelantará el arranque oficial de la temporada.

El ritmo de las reservas para este año está espoleando la actividad y los planes de todo el sector. A pesar de que los clientes no cierran sus vacaciones con la antelación que era habitual en época prepandémica, es cierto que sí se está produciendo un aumento de dicha antelación con respecto a las últimas temporadas.

Así, la creciente demanda está llevando a las compañías aéreas a modificar su planificación al alza. Air Europa, que acaba de cerrar el mejor año de su historia, ha aumentado un 5% su oferta de asientos ante el incremento de las ventas previsto para el primer trimestre de 2024. Lo mismo sucede con Iberia Exprés, que ha anunciado otro 5% más de capacidad para las conexiones con Baleares este invierno.

Por otro lado, un mercado turístico en auge para el Archipiélago como es el estadounidense va a ampliar sus vías de llegada. La compañía United Airlines incrementará un 12 % la capacidad de carga de los aviones que realizarán la conexión Nueva York-Palma la temporada que viene. Después de lo que la compañía define como un «año de consolidación» de la ruta que estrenó en 2022 (tres vuelos semanales entre el 25 de mayo y el 25 de septiembre), los resultados han sido lo suficientemente positivos como para implementar un aumento de las capacidades que permita dar respuesta a la creciente demanda.

Desde las grandes cadenas hoteleras mallorquinas se vaticina un 2024 como mínimo tan positivo como el año pasado, a pesar de que la presencia de factores condicionantes de índole internacional como la inflación o los conflictos bélicos en Europa y Oriente Medio. RIU, Barceló e Iberostar confirman que 2023 se cerró con unos resultados mejores de lo esperado y que no observan ningún síntoma de «desaceleración» o «debilitamiento» de la demanda que hagan prever que la temporada en ciernes vaya a registrar niveles más bajos.

Por su parte, el CEO de Meliá, Gabriel Escarrer, despedía el año con un escrito en redes en el que resumía la evolución del turismo global en 2023 como «de bien a mejor».

En cuanto a las previsiones para 2024, señalaba, «desde la prudencia», que «indicadores como los niveles de reservas realizadas nos permiten apuntar a una positiva campaña de Navidad -en la que esperamos mejorar la ocupación y la tarifa media registradas en 2022- y unas ventas para 2024 que superan las registradas hasta la fecha el año pasado».

Por otro lado, Escarrer hace hincapié en el debate sobre la sostenibilidad de la actividad turística y de nuevo rompe una lanza por la conciliación de la industria que no se centre únicamente en el crecimiento cuantitativo, sino que apueste «por un turismo más inclusivo, sostenible y regenerativo».
Baleares rompió ya en octubre todos sus récords en cuanto a llegadas turísticas y en el acumulado hasta noviembre se registraban ya 17,5 millones de visitas nacionales e internacionales, un millón más que en sus años de máximos, 2022 y 2018.

Por lo que respecta a la facturación, esta se incrementó un 15 % con respecto al año anterior, con ya cerca de 20.000 millones de euros en gasto turístico, cerca de 1.200 euros de media por visitante.