La Reina Sofía recibe la Medalla de Oro de Baleares de manos de la presidenta, Marga Prohens. | M. À. Cañellas

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«Agradecer la honra que supone para mí este galardón que ha sido concedido por el gobierno de Baleares. He tenido el privilegio de disfrutar durante más de medio siglo, que se dice pronto, de estas maravillosas islas, de sus gentes, junto a mi familia, donde siempre nos han acogido con tanto cariño y afecto. Espero poder seguir haciéndolo muchos años más», afirmó este jueves la reina emérita doña Sofía tras recibir la Medalla d'Or de les Illes Balears que cada año entrega el Govern. «Me siento aquí como en casa. Muchas gracias por todo», añadió, en catalán, al concluir su intervención entre aplausos.

La reina emérita fue galardonada por su «fidelidad» y «compromiso absoluto» con la comunidad autónoma y por ser su «embajadora en el mundo», según defendió ayer la presidenta balear, Marga Prohens. En su discurso oficial describió a doña Sofía como «la esposa, la madre, la abuela y la hermana que descubre durante décadas, año tras año, estas islas con su familia». En Baleares, la reina emérita ha podido recorrer sus calles y rincones con «intimidad» y «discreción», transmitiéndoles a sus nietos «la pasión por el mar» y su interés por la cultura y las gentes de esta tierra, según Prohens. De manera especial, la presidenta destacó la preocupación de la reina con las personas más vulnerables de las islas y su apoyo a las ONG locales, como Proyecto Hombre, que trabajan en favor de las personas más débiles.

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La presidenta aseguró que doña Sofía ha sabido «sumergirse en la vida de estas islas hasta convertirse en una mallorquina más, en una ciudadana más» de las Islas. «Por esa estima, por su compromiso social con entidades de nuestras islas, por ser anfitriona y embajadora de nuestras islas en el mundo, es un honor distinguir hoy a su Majestad la reina doña Sofía con la máxima distinción de nuestra Comunidad, merecida desde hace mucho tiempo», concluyó Prohens.

«Es imprescindible que gestionemos el legado patrimonial, material, inmaterial y empresarial del cual somos herederos y responsables», afirmó la directora general de Mater, Bàrbara Mestre, que intervino en nombre de todos los galardonados con el Premi Ramon Llull. De la entidad que dirige, también premiada, afirmó que en 60 años la dignidad de los vulnerables nunca han sido negociable, y deseó unas Islas de «paz y bien». A lo largo de la ceremonia celebrada en la Llonja se intercalaron actuaciones musicales, como la de la artista Júlia Colom, previa a la pronunciación de los discursos.