El gobierno insular, por lo tanto, pagó 1.936 euros por cada uno de los informes que apoyan la modificación de la fecha; una decisión que no consultaron con el Departament d'Història de la Universitat de les Illes Balears (UIB), que es la máxima autoridad balear en estos asuntos y que lo hubiera hecho gratuitamente.
«Ya sabíamos que eran informes ad hoc y ahora el pago de los mismos restan credibilidad y confirman que están hechos con una finalidad y para cumplir un encargo», según el portavoz de Més en el Consell, Jaume Alzamora, que ha comentado en el pleno este tema porque su partido es el que preguntó sobre cuánto costaron los estudios.
El conseller de Presidència, Toni Fuster, se ha reafirmado en que el cambio está avalado por los tres expertos que hicieron los informes citados y que 28 ayuntamientos (todos del PP) apoyaron el cambio de fecha. Alzamora también ha cuestionado el apoyo de los alcaldes del PP al cambio porque en la mayoría de casos no pasó por pleno municipal. Asimismo, el miércoles otros 25 alcaldes de Mallorca mostraron su rechazo, que se suma al centenar de historiadores que ya lo hicieron.
De esta manera, y después de siete años, el Consell de Mallorca celebra oficalmente la Diada de la Isla el 12 de septiembre, como se venía haciendo desde que Maria Antònia Munar instaurase esta fecha en 1997. El PSIB, Més y el PI defienden mantener el 31 de diciembre, que los tres partidos, junto al desaparecido Podemos, impulsaron en 2016. Esta era la fecha que se venía celebrando antes y después del fin de la dictadura franquista.
9 comentarios
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3.2 de 3: por cuarta vez (Si el motivo es un exceso de letras, lo he dividido en 2) Por ejemplo, sólo recordar aquel derecho abominable: el jus primae noctis, es decir, el derecho de la primera noche –o "derecho de pernada" como era conocido en Castilla– en Mallorca no tenía validez gracias a la Carta de Franquesa. Sólo una excepción en el derecho civil: la prohibición de vender tierras a caballeros y clérigos. Ello quizás para evitar la concentración de grandes propiedades bajo un mismo linaje u orden monástica, pues el rey, claramente, pretendía que en la isla hubiese propietarios libres con tierras libres. El nacionalismo pancatalanista necesita falsear la historia al carecer de fundamento una desquiciada reivindicación separatista en un régimen constitucional de amplios derechos y libertades en pleno siglo XXI. En nuestra mano está consolidar, en diferentes ámbitos, una sociedad civil comprometida con valores democráticos como la verdad y la justicia, que en un marco de convivencia y respeto siga dando ejemplo como el reflejado por un amplio sector de la sociedad balear en “sa festa de l’Estandard”. Demostrando que no tienen cabida los intolerantes que pretenden acabar con nuestra histórica identidad para romper, que no reformar, el régimen democrático-constitucional y la libertad que proporciona la unidad de una España fruto de las aportaciones de todos los pueblos que la componen. Celebremos el 12 de septiembre, las libertades concedidas y no el 31 de diciembre el genocidio acaecido.
3.1 de 3: por cuarta vez (Si el motivo es un exceso de letras, lo he dividido en 2) El 12 de septiembre se rememora el juramento solemne que hizo el recién proclamado rey Jaume II de Mallorca, de los privilegios y franquicias de nuestro Reino, en 1276. El cronista Benet Pons Fàbregues nos recuerda el primer pacto entre Jaume I –padre de Jaume II– y el resto de magnates que debían asistir a la conquista de Mallorca. En ese pacto se acordaron repartirse las tierras según el esfuerzo de cada una de las partes que asistían a la campaña insular, en el cual se añadía una cláusula sorprendente para la época. Disposición que permitía adquirir tierras, no solamente a los vasallos del Rey y de los barones, sino a todos los hombres que fuesen a la guerra, inclusive a los que viniesen de otros reinos ("omnes homines de terra nostra et aliunde tenientes", "todos los hombres de nuestro país y de otras tierras"). Dos meses después de la conquista de Mallorca, el rey Jaume I concedió a los pobladores de Mallorca la Carta de Franquesa (Franquicia), la cual constituye el nuevo Reino, el de Mallorca, sobre una base de igualdad, muy avanzada para la época. Tanto es así que no pocos historiadores de los siglos XIX y XX bautizaron a Jaume I con el sobrenombre de "democrático". En ella los caballeros, vieron recortado su poder, mientras que los ciudadanos y payeses encontraron en ella la posibilidad de repoblar un nuevo reino con grandes dosis de libertad.
ToñitosMás tenemos que pagar por indemnizaciones y parece que no se han leído ningún informe o es que los servicios jurídicos son nulos o inexistentes (y también los pagamos).
Problemas pues con la UIB porque son unos vendidos a Cataluña y los de la OCB mas aun, estos solo pretenden catalanizar aun mas lo que queda de Baleares, con falsedades y mentiras, no se si por lavada de cerebro o por dinero, quien sabe, pero que son unos vendidos totales segurísimo.
Como siempre el ciudadano pagando los caprichos de los políticos!
sempre feliçNo sé si estoy de acuerdo con usted. Pero parece que usted ha hecho el informe gratis. Me parece una pasada pagar eso por tres informes.
Los de la Uib son de Més. La deducción de lo que hubieran dicho está clara. Les interesa más la política que la verdad histórica. Es un departamento fuertemente ideologizado, como se puede comprobar curso tras curso por parte de los alumnos.
2 de 3 Acudiendo a las fuentes históricas se desmonta fácilmente la manipulación e invención catalanista: Los estudios más rigurosos basados en los datos que aporta el propio Jaime I en su crónica, o consultando la obra de Jose Mª Quadrado “Historia de la Conquista de Mallorca”, o la más reciente recopilación, fundamentalmente de D. Álvaro Santamaría, realizada por Juan José Clar en su excelente libro “La verdad sobre la conquista de Mallorca”, nos arroja una cifra, también calculada por el investigador Tomás Ribot, de 29.700 conquistadores, aproximadamente, entre soldados, caballeros, y nobles. De estos, según las fuentes citadas, cerca de un 25% eran originales de los que podríamos denominar como condados catalanes (Cataluña no existía como tal y mucho menos la lengua catalana), el resto eran procedentes de Navarra, de los condados de Nimes, Carcasona, Bearn, Bezier, Foix, Bigorre, Provenza, Caralt, Tolosa, feudatarios del rey de Aragón, además de venecianos, castellanos, pisanos o portugueses. De los 29.700 tan sólo los caballeros y nobles que sobrevivieron a las batallas y a la posterior epidemia de peste tuvieron derecho al reparto general de Mallorca. Con los datos del “Repartiment” nos encontramos con un total de 806 personas, entre nobles, caballeros y miembros del clero, que recibieron tierras mallorquinas al año siguiente de su conquista. De entre todos ellos sólo se contabilizan como catalanes 190. Esta es la verdad histórica. La que se puede cotejar con las fuentes. Siendo falsas afirmaciones tales como, “conquista catalana o catalano-aragonesa de Mallorca”, siendo los “catalanes” una minoría del total de los conquistadores. No se construyeron Masias, no se bautizaron a los nacidos con nombres de pila catalanes, no hubo gastronomía, ni vestimenta catalana, etc., y lo más importante se siguió "XERRAT" nuestra lengua madre. Por si todos estos datos objetivos no fueran suficientes, en el aspecto lingüístico, con la llegada de Jaime I, la lengua balear ya es una realidad incuestionable, forjada durante 14 siglos de andadura propia, tenemos el testimonio del mismo D. Jaime I en su Crónica Real: Cuando el Rey desembarca en el islote de Pantaleu un nativo llamado Alí de la Palomera se le acerca a nado. En la corta charla que tienen los dos el nativo se dirige al Rey Jaime en “son llatí”, es decir, en "sa seva llengua romanç mallorquina". La aportación de nuevos pobladores y la permanencia de una lengua romance en Mallorca permite que Ramón Llull pueda usar la lengua mallorquina para las obras que escribe, y que en 1341 ya se documente la lengua de Mallorca como “loquitur ad modum maioricencem” (habla a la manera de la mayoría).
Falso, la UIB, MES y organismos similares se lo cobran muy bien a base de subvenciones