Avión de Air Europa en un aeropuerto. | EL ECONOMICO

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El holding de aerolíneas IAG ha comunicado a la Comisión Europea que eleva al 52 % el porcentaje de vuelos operados por Air Europa que cederá a coste cero a la competencia después de la fusión de la compañía de Globalia con Iberia.

De esta manera, el grupo amplía en doce puntos la oferta inicial de una cesión del 40 % de las rutas como la principal concesión en este nuevo diseño de las condiciones. El objetivo es convencer a la Comisión para que dé su beneplácito a la operación de compra presentando las mayores garantías de que la asimilación de Air Europa no se traduce en una amenaza para la libre competencia.

De hecho, este organismo ya había expresado sus dudas ante la preocupación de que la libre competencia saliera perjudicada y nunca ha ocultado sus recelos en ese sentido ante una operación que lleva fraguándose desde finales de 2019.

Concretamente, señaló que la compra podría constituir «un riesgo para la competencia con los archipiélagos, Sudamérica y otros países de Europa», y expresó sus temores ante la posibilidad de un aumento de precios para los pasajeros y una caída en la calidad en los servicios.

La nueva oferta fue trasladada el pasado 10 de junio. Según aseguraron desde Iberia, «se trata de un esfuerzo muy importante, que demuestra nuestro interés por la operación y nuestro deseo de que la compra de Air Europa se realice con todas las garantías para los consumidores».

En ese sentido, las mismas fuentes subrayan que ceder el 52 % de las rutas no supone una disminución de la capacidad, sino «la garantía de que en todas las rutas haya varios competidores y, por tanto, diferentes opciones para los viajeros».

Por lo pronto, varias aerolíneas ya han mostrado su interés por absorber parte de las rutas de Air Europa que quedarán liberadas, entre ellas Avianca, Binter, Iberojet, Ryanair, Volotea y World to Fly. El propio consejero delegado de IAG, Luis Gallego, ha confirmado estos nombres como los que se han postulado como remedy takers, según su denominación habitual en la terminología del sector.

Por otra parte, la Comisión Europea dispone ahora hasta el 20 de agosto para pronunciarse, aunque ese plazo podría verse ampliado si este organismo lo estima oportuno.

Desde Iberia, se insiste en que la compra de Air Europa es esencial para desarrollar el centro de conexiones de Madrid al nivel de los más preminentes del norte de Europa. En ese sentido, aseguran que la conectividad de largo radio en España se vería intensamente ampliada -en especial con trayectos hacia el continente asiático- y todo ello redundaría en mejoras en cifras de empleo y crecimiento económico.

Por otro lado, en ningún momento se ha precisado cuáles serían las rutas concretas englobadas en ese 52 % que se cederá a la competencia.