El Govern inicia el Presupuesto de 2025 con el objetivo de «preservar la libertad»

Esta publicación es la orden oficial del vicepresident a los consellers para que comiencen a preparar las cuentas del año que viene que se aprobarán en el Parlament a finales de este año. Costa ha indicado a los consellers que es necesario mantener el impulso en la inversión pública «como el gran reto al que ha de responder el Presupuesto de 2025».

El texto firmado por Costa añade que los ejes preferentes de actuación serán el año que viene las infraestructuras de tipo social, sanitarias y educativas, las del ciclo del agua, la movilidad, vivienda, eficiencia energética, medio ambiente, formación de capital humano, investigación e innovación, y dependencia y servicios sociales, entre otros. El vicepresident ha reconocido que el año que viene se mantienen «algunas incertidumbres» como el hecho de que aún esté pendiente el nuevo sistema de financiación autonómico, la posible condonación de parte de la deuda pública autonómica por parte del Estado.

Más población

Costa también ha señalado que la prórroga de los Presupuestos del Gobierno de este año y el hecho de que la regla de gasto no tenga en cuenta ciertos factores, como el crecimiento poblacional, son una complicación añadida. Costa ha advertido a los consellers de que todos estos factores obligan a que los proyectos de inversión incorporen, como apoyo al proceso de toma de decisiones, «mecanismos de evaluación rigurosos» con el objetivo de conseguir la máxima eficiencia en el uso de los recursos públicos.

Todos los consellers y responsables de empresas públicas deberán tener en cuenta en sus estudios y estadísticas la perspectiva de género en el diseño de sus políticas, la afectación a la infancia así como la perspectiva climática.

El trámite para la aprobación de los Presupuestos empezó este jueves pero las cuentas no saldrán adelante hasta el mes de diciembre, pero el Govern deberá pasar antes por dos pruebas con sus socios: la aprobación del techo de gasto y el proceso de presentación de enmiendas. Vox hizo valer su fuerza en estas dos votaciones hasta el punto de que la votación del techo de gasto se retrasó hasta que PP y Vox pactaron finalmente la puesta en marcha del plan piloto para la elección de lengua. Después obligó a destinar 20 millones a este plan.