Turistas en la Plaça Major de Palma, en plena visita por el centro de la ciudad. | Jaume Morey

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El «dinamismo» y la buena marcha general de la economía balear en la primera mitad del año ha motivado que el Govern revise al alza sus previsiones de crecimiento para 2024. La Dirección General d'Economia i Estadística ha elevado ese porcentaje al 3,2 %, seis décimas por encima de la última previsión, presentada el pasado marzo.

Con todo, desde el Ejecutivo reconocen que este vaticinio se basa en datos que abarcan de enero a mayo (salvo los del paro, que llegan hasta junio) y que es posible que la inercia positiva no se haya extendido a los dos últimos meses. Así lo ha reconocido el vicepresident y conseller d'Economia, Antoni Costa, ante la inquietud transmitida desde el sector empresarial por un primer tramo de la temporada que no está respondiendo a las expectativas generadas.

El informe presentado por el vicepresidente esta mañana, Moment Econòmic de les Illes Balears del mes de julio, destaca un incremento interanual del 26 % de la inversión extranjera en el primer trimestre y un aumento del gasto turístico hasta mayo del 14,6 %, alcanzando los 5.204 millones de euros. El gasto por persona asciende a los 1.032 euros (una subida del 5,5 %), mientras que las llegadas rozaron un 9 % más que el año pasado, superando los 5 millones de visitantes. Paralelamente, el mercado laboral muestra cifras de récord un año más, con una afiliación a la Seguridad Social de 626.558 personas en junio, un 3,2 % más que en 2023.

«Lo que nos indican los datos es que de enero a mayo el comportamiento de la actividad económica es muy bueno», ha señalado Costa para explicar que siguen atentos a las observaciones de sectores empresariales que manejan balances más inmediatos. En ese sentido, desde la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), y a raíz de las últimas cifras de la Encuesta de Población Activa (EPA), se advirtió de una situación «preocupante» ante «las dudas de un inicio de temporada que no está siendo el esperado en varios sectores del tejido empresarial balear».

Costa indicó al respecto que «no tengo por qué no creer las previsiones que puedan hacer ellos porque disponen de datos de primera mano» y emplazó a los meses próximos para poner disponer de estadísticas ya más sólidas sobre la evolución actual de la temporada turística.

Por otro lado, el vicepresident volvió a referirse al gran pero del crecimiento económico balear: su limitada capacidad para repercutir los buenos datos macreconómicos en la calidad de vida del conjunto de la ciudadanía. Así, ha señalado que el patrón de crecimiento de las Islas continúa «fuertemente basado en un crecimiento en volumen, y esto no deja de ser preocupante». Es más, ha subrayado que un patrón de seguimiento así «no es sostenible».