La constructora que bloquea la residencia de Son Dureta está vinculada con el ‘caso Koldo'. | Jaume Morey

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Todavía faltan meses para volver a ver actividad de obra en la residencia sociosanitaria de Son Dureta que lleva paralizada desde el pasado mes de enero. La Conselleria de Afers Socials volverá a licitar el 40 % de la ejecución de la infraestructura (que es lo que falta para darla por terminada) el próximo mes. Pero la administración es lenta y una vez salga las condiciones, deberán presentarse de nuevo las empresas constructoras que quieran optar, escoger la mejor oferta que cumpla con todas las condiciones y volver a adjudicar las obras.

De cumplir con esta previsión, la residencia que quiere sumar 120 nuevas plazas sociosanitarias podría estar terminada en 2026 aproximadamente, unos tres años después de lo previsto.

La empresa Levantin, Ingeniería y Construcción S.L. (LIC) fue la encargada de construir el primer edificio del parque sociosanitario de Son Dureta pero los problemas empezaron a finales del año pasado cuando la constructora paralizó su actividad en otras comunidades presentando posteriormente un preconcurso de acreedores.

La de Son Dureta quedó estancada en enero y desde entonces, Afers Socials solicitó una resolución de contrato por incumplimiento elevando la petición al Consell Consultiu que se pronunció en mayo. Una vez resuelto este contrato empezaron los trámites para volver a licitar aunque no se conoce todavía el alcance del presupuesto que deberá tener en cuenta la inflación y actualizar los costes.

Esta residencia es un centro de larga estancia que, al terminarse, se transferirá al Consell de Mallorca, encargada de ponerla en funcionamiento y de sumar las 120 plazas repartidas en tres plantas a la Red Pública de Atención a la Dependencia.

Iba a ser el primer edificio en terminarse pero ahora irá a la par que los que forman parte de la Fase 1, ya en manos de la Conselleria de Salut, que ha iniciado la construcción de los módulos B1, B2 y B3. Se trata de tres edificios nuevos, conectados a diferentes niveles, con una superficie de 38.630 metros cuadrados, que se ubican donde en su día estuvo el edificio verde y el Materno-Infantil.

Esta zona se destinará a estrenar 242 plazas para pacientes complejos que necesiten de una estancia media de dos o tres meses. Además se construirá un hospital de día, un área ambulatoria, y un nuevo centro de salud con SUAP (Servei d’Urgències d’Atenció Primària), entre otros. Su periodo de ejecución, tras haber paralizado también las obras al toparse con una antigua canalización de agua que contenía amianto, se sitúa a finales de 2026.

Por último, mientras ambas zonas están ya en fase de construcción, hay una Fase 2 que engloba la parte del edificio semicircular. Que ha empezado a derribarse ya y que, presumiblemente, será el tramo final.

Después de descontaminar materiales peligrosos y de realizar la desconexión de la red de servicio, se está desmantelando el edificio más emblemático de Son Dureta para volverlo a construir con una capacidad de cargar adaptada.

Una vez se limpie y acondicione esta parcela empezarán las últimas construcciones entre las que habrá un hospital de media estancia con otras 320 camas y una unidad de salud mental, así como la nueva sede del Banc de Sang o el centro administrativo del parque sociosanitario, entre otros.