Vista aérea de la ciudad de Palma. | Alejandro Sepúlveda

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El Govern exigirá un mínimo de cinco años de residencia en Baleares para poder acceder a un piso de VPO o de promoción pública. Este medida se implantará primero en el programa de alquiler seguro, con el que Govern confía en estimular la salida al mercado de alquiler de una parte de las 100.000 viviendas vacías que se calcula hay en las Islas. El programa lo presenta este lunes el conseller d’Habitatge, José Luis Mateo, pero la presidenta Marga Prohens ya dio unas pinceladas en el Debate de política general, donde precisó que solo podrán ser beneficiarios de estas ayudas quienes acrediten cinco años de residencia en las Islas.

«Este criterio lo extenderemos al acceso a las viviendas públicas, a petición de los diferentes ayuntamientos donde se proyectan», aseguró la presidenta. «La política de vivienda de estas islas se planifica para los residentes, ahora sí», añadió Prohens. En estos momentos no se exige un periodo mínimo de residencia en las Islas para acceder a un piso del Ibavi. Se pide que el demandante sea residente en Baleares, pero no hay fijado ningún periodo mínimo, que es lo que se irá haciendo a partir de ahora. El criterio que se aplica para la concesión de un piso de alquiler es estrictamente económico, más allá del tiempo de residencia del solicitante.

PP y Vox están negociando cómo se articularán exactamente el cambio en los requisitos para obtener las ayudas. Desde el Govern explican que varios municipios de las Islas en los que se están construyendo VPO de alquiler a instancias del Ibavi han pedido que se incluya este criterio para que facilitar el acceso de los residentes a estas promociones. Señala, por ejemplo, que el Ayuntamiento de Esporles, con un alcalde de Més, ha aprobado por unanimidad una propuesta en el pleno para pedir que las viviendas se concedan a quienes lleven al menos 7 años de residencia en el municipio. También el Ayuntamiento de sa Pobla ha planteado que se tenga en cuenta los años de residencia para acceder a una de las viviendas del Ibavi.

A la espera de que se aplique esta exigencia en el resto de programas de vivienda, ya está confirmado que se pedirán cinco años de residencia para el programa de alquiler seguro que este lunes se presenta. Se trata de un programa basado en la intermediación del Govern entre los propietarios y los destinatarios de alquiler por el que el Govern garantizará el pago de las cuotas de alquiler a los propietarios que cedes sus pisos a un precio que se situará por debajo del precio de mercado pero adaptado a la realidad de cada municipio.

Los propietarios podrán recibir al abono del Govern en un solo pago y el Ejecutivo garantizará la devolución del inmueble en el mismo estado en el que lo captó pata el alquiler. El programa busca poner en contacto a personas «con rentas medias y solventes» que puedan pagar un alquiler y a propietarios de pisos vacíos «que busquen seguridad y tranquilidad para alquilar sus pisos», en palabras de Marga Prohens.

Los expertos en materia de vivienda aseguran que uno de los grandes problemas para la salida de viviendas vacías al mercado es el miedo de los pequeños propietarios a los impagos, a los desperfectos o a que las viviendas terminen siendo okupadas sin que el inquilino pague el correspondiente alquiler, según la presidenta. La medida busca dar seguridad y garantías para sacar las viviendas al mercado.

Otro objetivo de este programa es enfriar el recalentamiento en el precio de los alquileres ya que el Govern fijará un tope a los propietarios en función de cómo esté el mercado en cada zona. Desde el Govern precisan que serán viviendas de precio medio y que en ningún caso se podrán apuntar inmuebles de lujo. El conseller dará a conocer los detalles de este programa que puso en marcha su antecesora, Marta Vidal, quien calculó que podrían salir al mercado de alquiler unos 2.000 pisos vacíos.