En Balears el gasto en pescado está un 0,5 por ciento por debajo de la media nacional. | Jaume Morey

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Dos litros de aceite, catorce de refrescos, dos kilos de pan, seis de hortalizas, ocho de frutas, dos de pollo, uno de cerdo o dos de patatas. Es lo que se gasta en Balears por encima de la media nacional. Cada persona que vive en las Islas destina a comer y beber 1.988 euros en un año, más de un 15% por encima de un ciudadano español medio. Según el informe anual de la empresa estatal Mercasa, la cantidad destinada a comida y bebida se dispara. Solo en el último año son 237 euros más; un 13,5 por ciento. Hace una década comer en las Islas durante un año costaba, según esa misma estadística, 1.529 euros: era un 30 por ciento más barato que en 2024.

De acuerdo con el informe de Mercasa solo hay dos productos en los que los ciudadanos de las Islas gasten por debajo de la media nacional, sea por menor consumo o menor precio: huevos y leche. Hace una década, ese menor gasto afectaba también a carnes, pescados, frutas y verduras. El año pasado solo fueron esos: un 7,3 por ciento menos en leche, para 56,9 euros de media al año, lo que supusieron 58 litros y el 9,6 por ciento menos en huevos, lo que serían 126 cada año por residente. Se gastan 25,2 euros per cápita.

En el otro extremo, los productos en las que la desviación respecto a la media nacional es más acentuada en las Islas son el agua mineral y el vino. En el primero el gasto se eleva hasta los 28,6 euros de media y es más del doble de lo que se invierte en el Estado en su conjunto. Es de los pocos gastos que apenas ha variado. Son 60 céntimos más que el año anterior para unos setenta litros de agua embotellada al año.

En vino, el gasto es de 37,8 euros al año, un 20,8 por ciento más que la media nacional. Son dos litros por habitante. Según esa referencia, en Balears se consume per cápita una mayor cantidad de aceite (32,8 por ciento), bollería, pastelería y cereales (16%), refrescos y gasesosas (38,6%), derivados lácteos (17,8%) y hortalizas frescas.

Otro consumo que está un poco por debajo de la media nacional es el de pescado y mariscos, que es un 0,5 por ciento menor. Ocurre en este caso que la caída generalizada en la media nacional en los últimos años haya acercado a las Islas a este indicador, cuando hasta hace unos años el gasto en productos de la pesca era sensiblemente inferior. La partida que más ocupa del gasto es la que va destinada a comprar carne. Son 373 euros anuales, un 18,8 por ciento del total para 44,7 kilos de carne; un 11% va a pescado (18,5 kilogramos) y un 9 a fruta fresca.

El anuario cifra también que Balears cuenta con un total de 1.775 locales para actividades de distribución alimentaria de los que 719 son supermercados y doce hipermercados, que suman 321 metros cuadrados para cada mil habitantes. Mercasa cifra en 12.846 los establecimientos minoristas, de los que 1.775 están especializados en alimentación y medidas. En número les siguen supermercados pequeños, que son 460 y 121 de una superficie superior a los mil metros cuadrados. También se enumeran más de un millar de actividades autorizadas de mercadillo y comercio ambulante.

En cuanto a los servicios de restauración y bares, en las Islas hay 9.239 locales, un 3,5 por ciento del total nacional. De ellos, 4.946 son restaurantes y 3.533 son bares.

Más de 135 litros de agua en botella, 22,5 de cerveza y 28,9 kilogramos de pan

En valores medios por habitante, a lo largo del año 2023, según el anuario de Mercasa, se consumieron en las Islas más de 135 litros de agua mineral, 22,5 litros de cerveza, 49,7 de refrescos. En alimentos fueron 126 huevos, 44,7 kilogramos de carne; 37,7 de derivados lácteos; 28,9 de pan; 86,3 kilogramos de frutas frescas y más de 17 de platos preparados. También más de 13 litros de aceite.