Imagen de Gabriel Le Senne tras declarar ante el juez por romper las fotos de las roges del Molinar en Palma. | Pere Bota

TW
37

El juez abre el trámite para que el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne sea juzgado por un delito de odio. El magistrado instructor sí aprecia indicios suficientes de que la segunda autoridad autonómica menospreció y atacó la dignidad de las víctimas del Franquismo al romper una fotografía de Aurora Picornell y las hermanas Pascual en el pleno de la institución que debatía la posible derogación de la Ley de Memoria Histórica de Balears.

El magistrado admite la petición formulada por las acusaciones particulares y populares, que representan a familiares de las víctimas y a asociaciones. Les da trámite para que formulen escrito de calificación contra Le Senne y activa así el mecanismos para que éste se siente en el banquillo de los acusados. Tanto la Fiscalía como la defensa del político de VOX habían pedido el archivo de las actuaciones.

El Ministerio Público sostenía que la rotura de la imagen se había producido en un "arranque colérico" de Le Senne, por lo que la intención de este no era humillar a las víctimas ni por esta condición ni por su militancia política en 1936. Apoyaba esa conclusión en que Le Senne no acompañó el gesto con ningún insulto ni expresión y en que toleró la presencia de imágenes similares en el resto del hemiciclo dado que solo mantenía que no podían mostrarse por parte de miembros de la mesa del Parlament.

El Código Penal prevé condenas entre los seis meses y los dos años de prisión por delitos similares a los que se reprochan a Le Senne, además de penas de multa e inhabilitaciones para distintos cargos, no de alcance político. En cualquier caso, la representación del presidente del Parlament puede recurrir la decisión del magistrado ante la Audiencia Provincial.