Los 150 años del tren Palma-Inca: De las seis horas en diligencia a Inca a solo 25 minutos en ferrocarril

Pensando en el futuro más próximo, la presidenta del Govern balear, Marga Prohens, ha señalado en su discurso que «no renunciamos al tren a Alcúdia, así como el enlace a Artà y Capdepera». Y puso se relieve la inversión millonaria de más de 600 millones de euros que se ha puesto en marcha con la línea a Llucmajor, que estará lista en 2032 y supondrá un trayecto de apenas once minutos entre Plaza España y el Aeropuerto de Palma, acabando así con «una anomalía histórica después de no tener conexión de tren ni de metro». Esta línea, advirtió, supondrá un incremento «del 75 por ciento de los usuarios de Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM)».

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Prohens advirtió que además, se está ampliando el Plan Director y se están realizando análisis y estudios y «se priorizará la inversión según la demanda de pasajeros». Aunque el tren de Llucmajor se lanzará con fondos de la comunidad autónoma, Balears está a la espera de «un nuevo convenio ferroviario, un compromiso del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ofreció en Moncloa». La presidenta del Govern destacó además, el impulso del uso del tren entre los baleares más jóvenes y habló de las inversiones que ya se están llevando a cabo, como las nuevas oficinas de la SFM en el antiguo Hostal Terminus, así como la finalización este mismo año de la prolongación del metro de la UIB al Parc Bit.

Tal y como recordaba el alcalde de Inca, Virgilio Moreno, «hace 150 años, ¿cómo bajaron a Palma las autoridades de Inca a la inauguración del tren? Tardaron cinco o seis horas en carruaje y luego volvieron en el tren, cuyo viaje fue de 57 minutos. Ahora, nosotros tardaremos solo 25 minutos en llegar a Inca». Y es que tras el acto, las autoridades se subieron al tren para seguir las celebraciones en la capital del Raiguer. Moreno destacó el impulso que supuso la llegada de esta infraestructura a su ciudad, que supuso «una apertura económica y empresarial». Por su parte, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, advirtió que la línea ferroviaria Palma-Llucmajor «continuará mejorando nuevas conectividad con otros municipios».

En el acto participaron dos antiguos trabajadores de la SFM, ya jubilados: Sión Bennàssar y Rafel Morey. Bennàssar recordó que «en los años 70, el billete de tren de Palma a Inca costaba ocho pesetas y a Inca, 32. Antes entrabas en el tren y saludabas a la gente de Consell o Binissalem y te contabas la vida: ¿Sabes que no sé quién está embarazada? Ahora, de las 46 personas que van en el tren, 42 van con el móvil, dos duermen y las otras dos hablan». Los actos de celebración del 150 aniversario se prolongarán durante la jornada tanto en la Estación Intermodal como en la estación del tren de Inca.