El candidato socialista a la Moncloa, José Borrell, agradeció ayer
los apoyos expresados por sus compañeros del PSOE en respuesta a
los ataques del PP e IU, que consideran que el candidato está
«tocado» tras conocerse el presunto fraude fiscal cometido por dos
de sus ex colaboradores en Hacienda.
El candidato socialista instó a los ciudadanos a presenciar sus
intervenciones públicas para comprobar «cuán tocado estoy», y una
vez más reiteró que «lamenta, deplora y condena» la actuación de
sus ex colaboradores Ernesto de Aguiar, ex delegado especial de
Hacienda en Catalunya, y José María Huguet, ex jefe de inspección
en esa Comunidad. Aguiar y Huguet comparecieron el lunes en la
Audiencia Nacional como imputados en el «caso Torras-KIO» por
supuestos pagos de ese grupo en cuentas en Suiza, y afirmaron que
los 500 millones que no declararon a Hacienda los ganaron en
operaciones bursátiles.
El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Luis de Grandes,
indicó que la ejecutiva socialista se ha visto obligada a salir en
defensa de su «endeble candidato», y afirmó que la actuación de
Aguiar y Huguet debía estar en el subconsciente del secretario
general del PSOE, Joaquín Almunia, cuando afirmó que Borrell sería
el candidato socialista, salvo por razones de fuerza mayor.
El portavoz adjunto de IU en el Congreso, Felipe Alcaraz,
aprovechó también para insistir en que Borrell «está tocado», y
vaticinó que este asunto puede beneficiar electoralmente a IU.
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