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El alcalde de Marbella, Jesús Gil y Gil, ha visto las dos caras de una misma moneda en menos de 24 horas. El pasado domingo resultaba ser uno de los triunfadores de la jornada electoral. Sin embargo, el éxito se eclipsado para Gil y Gil en pocas horas. Ayer por la mañana el fiscal anticorrupción, Carlos Castresana, solicitaba más de 33 años de prisión además de otros cargos contra su persona.

Delitos de falsedad continuada en documento público cometida por funcionario público, tráfico de influencias, malversación de caudales públicos y prevaricación. Estas son las acusaciones lanzadas por el fiscal anticorrupción Carlos Castresana contra el alcalde de Marbella, Jesús Gil y Gil, en el escrito que presentó ayer ante el Juzgado de Instrucción número siete de la localidad malagueña en el que solicita un total de 33'3 años de prisión más otros 50 meses de multa, además que le sean impuestas un total de cinco multas que suman 2.060 millones de pesetas.

El Ministerio Público solicita penas de inhabilitación especial para empleo o cargo público por cada uno de los delitos de los que le acusa, sumando un total de 107 años.

El Grupo Independiente Liberal (GIL) ha irrumpido con fuerza en las circunscripciones donde ha presentado candidaturas por primera vez, Ceuta, Melilla y Campo de Gibraltar.

Aunque sólo ha alcanzado la mayoría absoluta en el caso de La Línea de la Concepción, el partido lidera que Gil se ha situado como lista más votada en Melilla y Ceuta, donde se queda a un escaño de la mayoría absoluta.

En la provincia de Málaga, Gil repite por tercera vez consecutiva la mayoría absoluta en Marbella. Gil ha conseguido 66.221 votos en Andalucía, casi 30.000 votos más que en 1995, lo que le permitirá contar con 74 concejales en esta comunidad autónoma, 31 más que en los anteriores comicios.