El presidente del Gobierno chileno, Eduardo Frei, advirtió ayer al
ex dictador Augusto Pinochet que deberá hacer frente a los
tribunales chilenos si finalmente Londres decide rechazar su
extradición a España y regresa a su país. «Son los tribunales de
justicia de nuestro país los que deben pronunciarse frente a las
responsabilidades penales que le corresponden», señaló Frei en su
primera reacción tras el anuncio de Londres sobre la posibilidad de
poner en libertad al ex dictador Pinochet tras destacar que «el
Gobierno de Chile ha realizado su trabajo».
Frei leyó una declaración oficial en la que valoró la decisión
del ministro del Interior británico, Jack Straw, de rechazar la
extradición a España del general Augusto Pinochet en consideración
al deterioro de su estado de salud. El presidente dijo que la
actitud de su Gobierno «contrasta fuertemente con la de aquellos
que hasta hace pocos meses exigían incluso la ruptura de relaciones
con Gran Bretaña y que hoy, en cambio, ocultan su adhesión a
Pinochet y guardan absoluto silencio».
Esta es la segunda ocasión en menos de una semana que el
presidente critica implícitamente a los partidos derechistas
Renovación Nacional y Unión Demócrata Independiente -que respaldan
al candidato presidencial Joaquín Lavín- por su cambio de postura
en el «caso Pinochet».
El mandatario atribuye esta actitud a un afán electoralista de
Lavín para ocultar su pasado pinochetista y, de este modo, cosechar
el apoyo de las clases populares para sus aspiraciones
presidenciales.
«Desde el primer momento de este largo proceso, mi gobierno ha
actuado de acuerdo a una sola línea, aplicando una consistente
política de Estado», argumentó el jefe del Ejecutivo.
Frei reconoció que al producirse la detención del senador
Pinochet, hace aproximadamente quince meses, «se acumularon en el
ánimo nacional hondas preocupaciones», pero «una crisis que podía
haber evolucionado gravemente, ha transcurrido dentro de cauces
moderados y pacíficos», destacó. En este sentido, Frei expreso su
satisfacción «por la madurez del país y sus instituciones», y
agradeció «el respaldo y la comprensión por nuestra decisión de
actuar con equilibrio, sobriedad y, sobre todo, mucha
prudencia».
La diputada socialista Isabel Allende, hija del fallecido
presidente Salvador Allende, afirmó que Pinochet «debe responder en
Chile por los crímenes cometidos en su régimen», y consideró
«extraordinariamente positiva» la detención del general en Londres
durante 15 meses, «porque demostró que nadie puede vivir en la
impunidad, y que la justicia debe ser igual para todos».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.