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El portavoz del PNV, Joseba Egibar, negó ayer que el presidente de su partido, Xabier Arzalluz, esté barajando la posibilidad de dimitir y explicó que la situación interna de su partido «es de absoluta tranquilidad». Egibar aseguró que la imagen de división responde a «una campaña orquestada a la que todos se suman», en referencia a «otros partidos y muchos medios de comunicación». Egibar también anunció que PNV y EA analizarán cada pacto municipal con EH «sin esperar a que se produzca otro asesinato en un ayuntamiento donde haya un pacto con EH».

Sobre la situación de Arzalluz, Egibar ironizó asegurando que «si hubiera un puesto dentro de una biblioteca nacional de Euskadi, igual se lo pensaba», y pidió respeto hacia «las organizaciones y las personas que conforman» el PNV. Recordó que «Xabier Arzalluz fue reelegido presidente del EBB, junto con el resto de la ejecutiva del partido, por unanimidad hace seis meses» y consideró que las informaciones sobre su posible abandono de la dirección del PNV, están fomentando «la cohesión interna» del partido.

La situación interna de su partido, según el portavoz, es de «absoluta tranquilidad». Egibar no quiso responder directamente a las opiniones vertidas esta semana por miembros del PNV como el ex lehendakari José Antonio Ardanza, el presidente del Parlamento, Juan María Atutxa, y el portavoz de Juntas alavesas Félix Ormazabal, sobre la necesidad de romper con EH, señalando Egibar que «nunca me meteré en público contra las opiniones de ningún afiliado» «Dentro del partido, he podido discutir pero creo que las opiniones sobre la idoneidad de uno u otro pacto corresponden al partido».