La inflación subyacente "la que excluye los precios energéticos y
de los alimentos frescos" creció un 0'2% en mayo y se situó en el
2'3% en tasa interanual. El grupo más inflacionista fue el de
transporte donde los precios aumentaron un 0'7% debido,
principalmente, a la evolución del petróleo. El encarecimiento de
carburantes y combustibles fue del 1'8% en mayo, del 9'1% en los
cinco primeros meses y del 21'2% en los últimos doce meses, al
tiempo que los productos energéticos aumentaron un 1'4% en mayo, y
situaron la tasa acumulada en el 6'6% y la interanual en el 15'4.
En mayo también se encareció la medicina, el menaje, y el
vestido, la vivienda, y otros "donde se incluye el turismo" ,
mientras que el único grupo que se abarató fue la alimentación. Por
autonomías, los precios subieron un 0'2% en todas las autonomías,
excepto en Asturias, Cantabria, Castilla-León, Castilla-La Mancha,
Extremadura, Galicia, Murcia, La Rioja y Ceuta y Melilla, dónde lo
hicieron en un 0'1%.
El secretario de Estado de Economía, José Folgado, aseguró que
«casi un punto» de la tasa interanual se debe al encarecimiento del
petróleo y reiteró que «el Gobierno no moverá en absoluto» su
previsión de inflación para el 2000 (2%). Dijo que en el segundo
semestre la inflación tendrá una evolución más favorable» debido a
la política monetaria europea más restrictiva; las buenas
perspectivas de la campaña agraria; la rebaja del déficit público,
y las medidas liberalizadoras que se aprobarán en próximas fechas.
Resaltó que si se descuenta la incidencia de la energía y la
depreciación del euro la inflación estaría en el entorno del 2%,
advirtió que subir los salarios basándose en los precios destruiría
empresas y empleo a largo plazo e instó a los empresarios de
servicios a «no pensar sólo en los beneficios a corto plazo».
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