Las grandes superficies y las asociaciones de consumidores son los
únicos colectivos que apoyan una ampliación de los horarios
comerciales, frente al rechazo unánime de pequeños comerciantes,
sindicatos y partidos. Los pequeños comerciantes mostraron ayer su
indignación por el avance de la medidas liberalizadoras de los
horarios comerciales y acusaron al PP de engañarles en las pasadas
elecciones. Por ello, advierten al Gobierno que están dispuestos «a
todo» si se aprueban estas medidas.
Por su parte, los sindicatos acusaron al Ejecutivo de beneficiar
a los intereses de las grandes superficies y de «ningunear» a las
comunidades autónomas que son con las que se llegó a un consenso
para elaborar el marco legal vigente hasta ahora. Los sindicatos
tampoco aceptan la propuesta. UGT también reprocha al Gobierno el
no haber incluido la liberalización horaria en el sector del
comercio en su programa electoral, por lo que el sindicato deduce
de este hecho «su connivencia con algún subsector empresarial».
Asimismo, tanto UGT como CC OO exigen que las comunidades autónomas
sigan siendo las que detenten la competencia en esta materia.
Convergencia y Unió ya advirtió el jueves que haría casus belli
de esta cuestión si el Ejecutivo se «empecinaba» en sacarla
adelante. No sólo CiU ha mostrado su rechazo a este plan del
Ejecutivo. PNV, PSOE e IU también expresaron su rechazo. La crítica
común es que estas medidas sólo servirán para que las grandes
superficies aumenten sus beneficios.
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