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EFE - GIJÓN El presidente del Principado de Asturias, el socialista Vicente Àlvarez Areces, apeló ayer a la «responsabilidad política» del Grupo Parlamentario Socialista y de la Federación Socialista Asturiana para «evitar un hecho sin precedentes en la vida política española», en referencia el enfrentamiento que Gobierno regional y partido mantienen.

La situación creada por las discrepancias entre el sector mayoritario de la Federación Socialista Asturiana (FSA-PSOE), controlado por los guerristas, y el gabinete de Vicente Alvarez Areces, quedó de manifiesto el lunes cuando los guerristas votaron junto al PP una proposición a favor de la tramitación de la Ley de Cajas y en contra del criterio del Gobierno que preside Areces. Según Areces, el borrador de ley presentado por el PSOE «va contra los criterios del Gobierno socialista y de una entidad fundadora como el Ayuntamiento de Gijón», y añadió que se producirán «fuertes controversias y puntos de vista diferentes en su desarrollo». Afirmó que «nadie puede comprender como un grupo parlamentario cuya obligación estatutaria es apoyar las acciones de su Gobierno no sólo no las apoya, sino que ayuda al principal partido de la oposición e incorpora enmiendas del PP que quita los derechos políticos al Ejecutivo sobre la Caja». Tras destacar «la falta de precedentes en un hecho como este en la vida política asturiana y en el socialismo español», Areces hizo un nuevo llamamiento «a la responsabilidad» y a que «se tengan en cuenta los acuerdos alcanzados en abril y se apueste por la unidad sobre un tema de esta trascendencia».

La eurodiputada socialista y candidata a la secretaría general del PSOE, Rosa Díez, exigió al presidente de la Comisión Política, Manuel Chaves, que intervenga en la crisis de los socialistas. A juicio de la eurodiputada socialista, la actuación del sector mayoritario del grupo socialista asturiano «no se puede tolerar» porque «se está vulnerando la capacidad del gobierno legítimo de Asturias».