Sindicatos, organizaciones de consumidores y asociaciones de
mayores rechazaron ayer los cambios en el sistema de copago de los
medicamentos que, según anunció la ministra de Sanidad, Celia
Villalobos, estudia su departamento y que se basan en un abono de
los fármacos en función del nivel de Renta.
Al desacuerdo mostrado por estas organizaciones se unió también
la Junta de Andalucía, cuyo consejero de Sanidad, Isaías Pérez
Saldaña, calificó la medida planteada por Villalobos de «verdadera
barbaridad». Las intenciones de la ministra tampoco han sido bien
acogidas por la Confederación Española de Organizaciones de
Mayores, que expresó su desacuerdo, en especial si no se acompaña
de medidas que restituyan su poder adquisitivo. El sindicato CC OO
considera, por su parte, que «hacer pagar un porcentaje del gasto
farmacéutico a un sector de los pensionistas tiene sólo un cariz
propagandista cuyo efecto sobre el volumen total de gasto será
irrelevante».
En la misma línea que este sindicato se pronunció FSP-UGT, cuya
secretaria estatal de Sanidad, Pilar Navarro, aseguró que esta
Federación apoya el control del gasto farmacéutico, pero no
mediante el nuevo sistema de co-pago que estudia Sanidad. Desde la
Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), además de rechazar
la medida, se denunció la contradicción que supone bajar los
impuestos indirectos al tiempo que se introducen fórmulas, de
apariencia distributiva, con objetivos fundamentalmente económicos.
Otra organización de consumidores, la Confederación de Asociaciones
de Vecinos, Consumidores y Usuarios (CAVE), exigió a Villalobos que
se preocupe por aumentar los presupuestos de su departamento y de
tomar medidas eficaces de ahorro en el gasto farmacéutico».
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