El presidente del Principado, Vicente Àlvarez Areces, aseguró ayer
que, tras la dimisión de la consejera de Hacienda, Elena Carantoña,
se centrará en «impulsar la acción de gobierno», mientras que el
líder regional del PP, Ovidio Sánchez, aseguró que el mejor
servicio que puede prestar a Asturias es presentar su dimisión.
Un día después de que la consejera de Hacienda diese a conocer
su dimisión, Àlvarez Areces afirmó que lo importante ahora para el
Ejecutivo asturiano es conseguir «encauzar todas las actuaciones
políticas para la solución de los problemas de los asturianos».
Areces aseguró que en su primer año de Gobierno, que calificó de
intenso, se han llevado a cabo importantes acciones, como la
reducción del desempleo o el aumento de la inversión, que han
quedado tapados en cierta medida con el tema de Cajastur, pero que
demuestran que el Gobierno tiene que seguir en esa línea.
No obstante, desde el principal grupo de oposición, Ovidio
Sánchez pidió ayer la dimisión del jefe del Gobierno regional, para
que «la crisis institucional y de gobierno no atrape a toda
Asturias», y propuso que el PSOE forme un nuevo Ejecutivo para el
que ofreció la «colaboración» de su partido. «Areces está obligado
a dimitir si le queda algo de entusiasmo por Asturias, para que los
avances generados en la región por la política del Gobierno de
Aznar no queden cercenados por la crisis», dijo Sánchez, quien
añadió que los socialistas cuentan con una «mayoría suficiente» en
el Parlamento asturiano para encargar la composición de un nuevo
Gobierno.
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