El sindicato Erne, mayoritario en la Ertzaintza, fue víctima ayer
de un ataque con un artefacto explosivo contra su sede en Bilbao,
que originó daños en el exterior del piso en el que está situada.
El paquete estaba compuesto por un cohete, una botella de gasolina
y un spray con una mecha, indicaron fuentes de la policía vasca. El
artefacto hizo explosión a las 14.10 horas en el descansillo del
cuarto piso de un edificio número 3 de la calle San Roque, en
Bilbao.
Según informaron miembros de este sindicato, el artefacto estaba
colocado en la esquina del descansillo que está fuera de la
cobertura de la cámara de vigilancia instalada delante de la puerta
de la sede sindical. La explosión, que dejó un fuerte olor a
gasolina, provocó el desconchado del techo del descansillo, que
quedó ennegrecido, sin provocar grandes daños materiales ni causar
heridos.
Sindicatos de la Ertzaintza, partidos políticos y el propio
consejero de Interior, Javier Balza, condenaron el ataque
perpetrado. Balza afirmó que los autores del atentado no van a
conseguir «que los miembros de este cuerpo cedan lo más mínimo en
su trabajo constante de luchar contra la delincuencia terrorista».
El consejero transmitió en un comunicado su «más enérgica repulsa y
condena» por el ataque y dijo que «se trata de una nueva agresión
hacia el conjunto de nuestra sociedad, en este caso representada
por unos servidores públicos como son los agentes de la
Ertzaintza».
El parlamentario del PP del País Vasco Carlos Urquijo señaló que
a ETA «siempre le ha molestado que exista una policía vasca
comprometida con la defensa de los derechos y libertades de todos
los ciudadanos».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.