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El paro registrado en el Inem subió en diciembre pasado en 1.997 personas y situó el total de desempleados en 1.574.844, el 9'23 por ciento de la población activa, según datos facilitados por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. El secretario general de Empleo, Juan Chozas, admitió que el dato no es positivo y «rompe la tendencia mantenida desde 1994», aunque lo justificó, en parte, por la situación económica internacional. Se ha vivido el período más largo de consecutivas caídas del paro, dijo Chozas tras insistir en que el ascenso del desempleo en diciembre era probablemente coyuntural y propiciado por la alta tasa de incorporaciones al mercado laboral, que no está siendo absorbida por completo y ello pese al gran dinamismo en la creación de empleo.

Chozas destacó el aumento de la contratación indefinida y a tiempo parcial así como la mejora del empleo femenino, e insistió en que en España, al contrario que en otros países, se sigue creando empleo. En diciembre el paro creció en la industria (10.866) y la construcción (18.487). Pero, bajó en la agricultura (1.983), en los servicios (15.031) y en el colectivo sin empleo anterior (10.342). El desempleo femenino descendió en 24.690 personas pero el masculino creció en 26.687 personas. En todo el año, el paro entre los hombres aumentó en 18.210 personas "hasta el 6'31 por ciento" y entre las mujeres, en 252 personas, hasta el 13'57 por ciento.

El paro bajó entre los menores de 25 años (13.258), hasta el 10'1 por ciento, pero subió entre los mayores de esa edad (15.255). El paro descendió en seis autonomías encabezadas por Andalucía, Madrid y Canarias. Pero subió en once, principalmente en Galicia y Catalunya. En todo 2001, se registraron 14.056.484 contratos, 227.565 más que en 2000, alza del 1'65 por ciento. En diciembre, los contratos fueron 959.514, por lo que 17.508 menos que en ese mes de 2000. De esos casi 15 millones de contratos, hubo 1.304.087 indefinidos, la mayor cifra en la serie histórica anual y que supone un incremento de 95.673 (un 7'92 por ciento) sobre el año anterior. Sólo en diciembre, los contratos indefinidos fueron 87.995 "el 9'17 por ciento del total" un cifra que supone un incremento de 856 contratos respecto al mismo mes del año anterior.

De los indefinidos en diciembre, 66.416 fueron a tiempo completo y 21.579 a tiempo parcial. Estos aumentaron sobre el mismo mes del año anterior un 11'38 por ciento y en todo el año se suscribieron 318.998 contratos de este tipo. Del total de indefinidos en diciembre, 67.141 se acogieron a la reforma laboral del pasado marzo. De ellos, 45.562 fueron a tiempo completo; 21.579 a tiempo parcial. Otros 20.854 contratos fueron otro tipo de indefinidos. Desde marzo de 2001 se registraron 816.074 contratos indefinidos acogidos a la reforma laboral, un 8'86 por ciento más que en igual período del año anterior. De ellos, 419.949 fueron conversiones de anteriores temporales y 396.125 fijos iniciales.

Oposición y sindicatos muestran su preocupación por las cifras
El secretario de política económica del PSOE, Jordi Sevilla, declaró que los datos del paro conocidos ayer «confirman la situación de crisis en la que está la economía española» y refuerzan la necesidad de cambiar la política económica bajando impuestos e invirtiendo más desde el Estado». El dirigente socialista consideró que los datos demuestran que la misma política económica no puede valer para épocas de bonanza y también para épocas de recesión. Desde IU, Javier Alcázar afirmó que el incremento del paro evidencia «un mal presagio» para el año que comienza y para el inicio de la presidencia española de la Unión Europea. Los sindicatos también ven con preocupación las cifras del paro. UGT acusó al Gobierno de no tomar las medidas necesarias para evitar que el menor crecimiento de la actividad incida en el nivel de desempleo. Por su parte, el secretario confederal de Organización y Comunicación de CC OO, Rodolfo Benito acusó al Gobierno de «no hacer sus deberes» en materia de empleo. El representante sindical reprochó al Ejecutivo su falta de visión al aprobar unos presupuestos que no dan respuesta a «una situación de crecimiento de desempleo que se venía observando con anterioridad».