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La Organización de Consumidores y Usuarios presentó ayer su cuarto informe de control de precios "de los cinco observatorios que está elaborando con motivo de la aparición física de la moneda única", con unos resultados que, según su portavoz, José María Múgica, «confirman la percepción ciudadana de que se ha producido un aumento generalizado de los precios». Así, el «pésimo ejemplo» que ha dado la Administración a los precios privados «ha marcado el camino a los demás», según la OCU, que ha analizado los precios de 750 productos de uso común entre los ciudadanos, aunque «los resultados no son un IPC, porque no hemos ponderado el mayor o menos peso de cada uno en la economía, pero sí sirven como un indicativo de la situación actual».

Según los datos recogidos, entre septiembre de 2001 y enero de 2002 los precios han registrado una subida media de un 2'66 por ciento (2'55 los precios privados y 3'22 los públicos), aunque la subida media en el mes de enero ha sido de un 1'6 por ciento (1'33 los privados y un 2'98 los precios públicos), explicó Juan Aguado, responsable del estudio. En cualquier caso, destacó, no se puede desligar la parte que corresponde a la subida habitual de precios de enero y la correspondiente a la entrada en vigor del euro, aunque «tememos que la mayor parte se deba a lo segundo».

Si se consideran los sectores más inflacionistas, los que más han aumentado sus precios desde septiembre han sido Correos (51'9% en enero, cuando aumenta sus tarifas), las panaderías (un 23'1%), los cines (8'6), bares y cafeterías (7'9) y transportes urbanos (6'3%). Se han detectado subidas desorbitadas en cartas certificadas, que cuestan un 99% más (de 155 a 308 pesetas), la barra de pan (un 50%, pasando de 50 a 75 pesetas), el cine (de 825 a 874 pesetas), el billete de diez viajes de metro o autobús (de 760 a 832 pesetas) o el menú del día de algunos restaurantes (de 1.100 a 1.165 pesetas).

En el extremo opuesto se sitúa la electricidad, que ha bajado un 17'3% "dato muy alto, matizó Aguado, debido a que el precio de los contadores de la tarifa nocturna han descendido un 46%, pero considerando el resto de precios medidos (energía, potencia y alquiler del servicio en tarifas 2.0 y 2.0 nocturna) se ha registrado una bajada de sólo un 1 ó un 2%". También ha disminuido desde septiembre el precio de la perfumería (un 11'8%), carburantes (5'4), televisiones vía satélite (0'74) y telefonía (0'7%).

Además, se ha dado una subida muy importante de los precios «psicológicos» "aquellos que causan impresión de ser más baratos, por ejemplo, 3'99 euros", en septiembre constituían el 22% de los precios y en enero el 48%. Como datos positivos, este cuarto observatorio destaca que el 83% de los productos ofrecen su precio en euros y pesetas, un dato «muy satisfactorio», ya que es una medida voluntaria, sólo es obligatorio marcarlo en euros (lo hacen un 13%, mientras que el precio sólo en pesetas, que es ilegal, lo aplican sólo un 4%). La OCU también ha detectado como positivo el hecho de que los errores en la conversión de pesetas a euros «se deben a las normas de redondeo, y no a la mala fe de los establecimientos».