El ex líder de UGT, Nicolás Redondo junto a su casa.

TW
0

ETA colocó un artefacto explosivo, con 21 kilos de cloratita reforzada con dinamita Titadyne, en uno de los servicios de caballeros de la Bolsa de Bilbao. ETA había colocado el artefacto junto a un depósito de fuel-oil, por lo que su explosión podría haber provocado una masacre. Una llamada anónima a la DYA y al diario 'Gara' alertó de la colocación de la bomba. La Ertzaintza, una vez localizada, procedió a su desactivación.

«Una catástrofe». Así definió el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, lo que podría haber conseguido ETA si llega a explotar la bomba que colocó en la Bolsa de Bilbao. Pocos minutos antes de las 10.30 horas, la DYA y el diario 'Gara' recibieron sendas llamadas alertando de la colocación de un explosivo que explotaría unos veinte minutos más tarde. En concreto, la bomba estaba preparada para explotar a las 11.00 horas, pero algo falló en el mecanismo.

Policía Municipal y Ertzaintza de desplazaron a la Bolsa bilbaína y procedieron al desalojo inmediato del edificio, ubicado en pleno centro de la capital vizcaína, y también de los inmuebles colindantes de la calle José María Olabarri. Un cordón policial desvió el tráfico por otras calles de Bilbao. En torno a las 12.00 horas, se amplió ese cordón, tras localizarse el explosivo, y se desalojaron más edificios.

Una hora más tarde, la Ertzaintza desactivó la bomba, un artefacto con 21 kilos de cloratita reforzada con dinamita de la marca Titadyne y compuesta por pequeños paquetes envueltos en plástico que contenían polvos amarillos y grises. ETA la había dejado en los lavabos de caballero de la entreplanta, pero justo debajo hay un depósito de fuel-oil. Es por eso que su explosión podría haber causado una masacre.

La Ertzaintza retiró el cordón policial poco antes de las 13.30, casi tres horas más tarde del aviso. «Es otra barbaridad más de las que nos tiene acostumbrados ETA, pero los artificieros, con su buen trabajo, han logrado desactivarlo», dijo Azkuna. Los terroristas tuvieron que colocar la bomba la misma mañana, después de que se permitiera el acceso libre al público, a las 9.00 horas. El edificio de la Bolsa no tiene ningún tipo de seguridad especial, tan solo un conserje a la entrada. Los partidos políticos vascos coincidieron al felicitar a la Ertzaintza por la desactivación de la bomba colocada por ETA.

Colocan un artefacto casero en el domicilio de Nicolás Redondo
La Ertzaintza explosionó ayer de forma controlado una olla que, al final, no contenía ningún tipo de explosivo, y que los violentos habían colocado junto a la puerta del domicilio del ex dirigente sindical Nicolás Redondo Urbieta, en Portugalete. Él mismo y el alcalde de la localidad denunciaron una campaña de «amedrentamiento» por parte de ETA y su entorno, especialmente contra el PSE. Sellada con cinta aislante, en el interior de la olla no había explosivos, sólo una bombona de camping gas que no estaba preparada para estallar. Fue la hija de Redondo Urbieta quien vio la olla, metida en una bolsa, cuando salía del domicilio para llevar al colegio a su hijo de 11 años.