Aznar durante su entrevista con la presidenta de Finlandia, Tarja Halonen.

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Aznar, desde Helsinki, aseguró que su deseo es anteponer «la prudencia del gobernante» por encima de cualquier otro sentimiento. De hecho, aseguró que necesita hacer «un esfuerzo muy especial» para mantener esa prudencia y no decir «lo que el corazón puede llevar a decir». «Sí quiero resaltar que cuando se llega a afirmar por escrito, por parte de algunos obispos, que lo mejor que les puede pasar a las víctimas es que los criminales salgan sueltos, yo creo que se está ante una perversión moral e intelectual grave», añadió Aznar, expresando su malestar con una pastoral que no sólo ha levantado una nueva polémica, sino que ha evidenciado una vez más la división entre nacionalistas y constitucionalistas.

Aún más duro se mostró el ministro de Exteriores, Josep Piqué, quien aseguró que la pastoral es «repugnante». «Introduce elementos de reflexión puramente política que vienen a justificar los actos terroristas y la actuación de los verdugos», señaló el ministro, que además precisó que «debe ser motivo de preocupación para la Santa Sede».

Sin embargo, no habrá respuesta por el momento desde el Vaticano. El embajador español ante la Santa Sede, Carlos Abella y Ramallo, aseguró que la práctica habitual no es de «reacciones inmediatas, sino que prima la reflexión y las conclusiones no siempre son públicas».

En la Conferencia Episcopal Española también hay voces que van más allá de la nota en la que se desmarcó de la pastoral. Monseñor José Manuel Estepa, arzobispo castrense, solicitó una reunión extraordinaria de la Comisión Permanente para elaborar un comunicado «más claro» en respuesta al texto de los obispos vascos. «Debemos saber que existe una importante parte del País Vasco que sufre y que tiene miedo y a la que hay que respetar», señaló.

De donde sí habrá respuesta es desde la propia Iglesia vasca. El Foro El Salvador ya está preparando un manifiesto de respuesta a la pastoral. Según fuentes de la asociación, el objetivo es dar a los obispos «no nacionalistas» la posibilidad de distanciarse de los argumentos de los tres obispos, que «están fuera de la realidad y mal informados». El documento, que «pondrá los puntos sobre las íes», estará listo en unos días.

Para el líder de UDC, Josep Antoni Duran Lleida, las críticas del Gobierno a la pastoral de los tres obispos vascos discrepante con la Ley de Partidos son «improcedentes e incomprensibles para nosotros. Las llamadas al Vaticano» son propias de «otros tiempos».