El flamante nuevo ministro ha mostrado su intención de reunirse con
los sindicatos cuanto antes para retomar el diálogo social para
evitar perjudicar los intereses de los ciudadanos.
El cambio en el Ministerio de Trabajo no les ha producido a los
sindicatos ni frío ni calor. Ni Cándido Méndez y ni José María
Fidalgo consideran a Juan Carlos Aparicio, ex ministro, responsable
del 'decretazo', así que están a la espera de saber si Eduardo
Zaplana tiene un nuevo guión.
Los sindicatos creen que la remodelación del Gobierno obedece la
necesidad de un cambio significativo en la política del Ejecutivo
porque a su juicio, «el problema no es de las personas, sino de las
políticas». El secretario general de CC OO, José María Fidalgo,
manifestó su deseo de que la «importante» remodelación impulsada
por José María Aznar signifique un cambio en la política del
Ejecutivo ya que, de lo contrario, las modificaciones del gabinete
«no servirán absolutamente para nada».
Fidalgo añadió que los cambios en el Gobierno no afectarán en
modo alguno a las movilizaciones planeadas contra la reforma del
desempleo, que se desarrollarán según lo previsto, ni a la
actividad de los líderes sindicales, aunque «ahora» desconozcan con
qué representante de los populares mantendrán un encuentro el
próximo día 24.
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ya indicó que esta
remodelación del Ejecutivo responde a una «crisis de gobierno» o
«crisis de Gobernación» y coincidió en la necesidad de un cambio de
talante en el presidente José María Aznar.
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