AgenciasMadrid18/07/02 0:00
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El desalojo por la isla Perejil recibió ayer en el Congreso el respaldo de PP, PSOE, CiU, CC y Partido Andalucista y el rechazo de IU y PNV, mientras que fue unánime la apuesta por redoblar los esfuerzos diplomáticos para solucionar la crisis. El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que su partido será «plenamente responsable» en la actual crisis con Marruecos y, tras ofrecer al Gobierno su «apoyo, comprensión y solidaridad», exigió a cambio información y una gestión de este asunto «con serenidad y calma». También el portavoz parlamentario de CiU, Xavier Trias, expresó su apoyo a la intervención armada en la isla de Perejil y felicitó a las Fuerzas Armadas por el éxito de la operación y por el hecho de que se haya llevado a cabo sin recurrir a las armas.

Felipe Alcaraz, de IU, se mostró crítico con Marruecos que, «más allá de su diplomacia sinuosa ha pasado a una política explícita, indefendible e inaceptable», pero aseguró que su grupo apuesta por una solución estrictamente diplomática. El representante del PNV, Pedro María Azpiazu, se mostró en contra de la intervención militar por haberse decidido con «bastante antelación» a la resolución aprobada ayer en el Congreso y por ir en contra del «espíritu» de ésta y añadió que «nos da la sensación de que fuimos utilizados para bendecir la misión».

Muy distinta fue la interpretación del diputado de CC Luis Mardones, quien elogió la «respuesta contundente» dada por el Gobierno y justificó la actuación militar para defender a España. El diputado del CHA, Jose Antonio Labordeta, se felicitó de que el desalojo no haya producido ninguna baja y de que la población marroquí en España no tenga que temer consecuencias. Por su parte, el representante del Partido Andalucista, José Núñez, trasladó el apoyo de su partido al Gobierno, aunque consideró que el conflicto sobre la soberanía de la isla de Perejil es de tipo jurídico.

Antich: «Aznar debió consultar con los partidos»
El presidente del Govern balear, Francesc Antich, fue uno de los pocos presidentes autonómicos que se pronunció respecto al desalojo del islote Perejil y lamentó que Aznar no hubiera consultado con los partidos políticos la operación militar. En este sentido, Antich afirmó que la misión «tendría que haber pasado por la consulta de todos lo grupos parlamentarios, puesto que ésta es la fórmula normal en cualquier estado democrático». Antich subrayó que el Ejecutivo central «ha contado con el respaldo del Congreso de los Diputados para hacer los esfuerzos pertinentes a través de la diplomacia y solucionar este conflicto con el diálogo». No obstante, el presidente del Govern balear criticó a Marruecos por «realizar una acción que nunca tendría que haber sido llevada a término, al ir en contra de los derechos de otro país».