Decenas de miles de personas se congregaron en Madrid en torno a la Cibeles .

TW
0

Las calles de la mayoría de capitales de toda España volvieron a acoger a cientos de miles de manifestantes en contra de la posible guerra en Irak, concentraciones que, aunque muy numerosas, no alcanzaron la participación de las celebradas hace un mes.

A pesar del frío y la intensa lluvia que caía sobre Barcelona, unas 300.000 personas, según la Guardia Urbana, y 500.000 según los convocantes participaron en una cadena humana y dibujaron un enorme mosaico humano con las palabras «!Guerra no!» en el Paseo de Gracia.

La manifestación más multitudinaria se celebró en Madrid, donde cerca de un millón de personas, según los convocantes, y 120.000, según la Delegación del Gobierno, se manifestaron encabezados por los líderes de la oposición y de los sindicatos.

Zapatero pidió a Bush, Blair y Aznar que escuchen a los millones de ciudadanos que exigen la paz.

El Nobel de Literatura José Saramago, aseguró en el manifiesto que puso fin a la marcha que los que se manifiestan «somos la mosca cojonera del poder».

Por la mañana, recorrieron las calles de Bilbao varios miles de personas, entre los que se encontraban la vicelehendakari del Gobierno Vasco, Idoia Zenarruzabeitia.

En San Sebastián varios cientos de personas participaron en una «concentración ruidosa» golpeando cazuelas y haciendo sonar sirenas y tambores.

En Andalucía fueron miles los ciudadanos que participaron en actos de protesta contra la guerra; la manifestación más grande fue la de Málaga, 20.000 personas según la Policía Local -80.000 según los organizadores-.

Uno de los actos relevantes fue el que se llevó a cabo en Morón, donde entre 8.000 y 15.000 manifestantes marcharon hasta la base militar, encabezados por la bailaora Cristina Hoyos.