La vicepresidenta del Gobierno, Fernández de la Vega, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.

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El Gobierno entregará a la comisión de investigación parlamentaria sobre los atentados del 11-M toda la documentación que ha solicitado. La excepción serán seis documentos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que el Consejo de Ministros ha decidido no desclasificar, y que se referían a su funcionamiento interno y sus contactos con servicios secretos extranjeros. Parte de la documentación que sí estudiará la comisión sólo se podrá consultar de manera reservada, sin que se pueda fotocopiar, o en la comisión de gastos reservados.

En la reunión del Consejo de Ministros se decidió la desclasificación y la entrega de la práctica totalidad de los documentos solicitados por la comisión sobre el 11-M, que se suma a la documentación ya entregada el pasado 29 de junio por la Secretaría de Estado de Relaciones con las Cortes. Aquel día se indicó a la comisión que el Gobierno debía estudiar los documentos que estaban clasificados.

Varias son las modalidades en que la comisión tendrá acceso a esta documentación. En primer lugar, el Ejecutivo ha decidido desclasificar cinco documentos que no ponían en riesgo la seguridad de los ciudadanos ni del Estado. Estos son los elaborados por la Policía, la Guardia Civil y el CNI sobre la amenaza terroristas islámica, tanto los realizados antes del 11-M como algunos de los realizados con posterioridad. También figuran los informes realizados sobre una posible conexión entre el terrorismo islámico y el de ETA.

Otros ocho documentos podrán ser estudiados en sesión secreta sin que puedan ser fotocopiados. Tampoco se entregarán otros 19 documentos, que se estudiarán en la comisión de Gastos Reservados, tal y como establece la Ley del CNI, y por tanto mantienen su carácter de información reservada. Estos documentos son los relativos a la posible existencia de armas de destrucción masiva en Irak, confeccionados antes de la guerra en el país árabe. La modalidad de analizar documentos en sesión secreta la había sugerido ya el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, al presidente de la comisión, Paulino Rivero.