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EUGENIO RODRÍGUEZ

La familia del PP de las Pitiüses, formada por aproximadamente 1.600 afiliados, votará mayoritariamente el domingo, en su VIII Congreso insular, la reelección de Juan José Cardona como presidente del partido. Han pasado ya 17 años desde la primera cita congresual de la fuerza conservadora en Eivissa y Formentera, entonces Alianza Popular (AP), celebrada en el Hotel Torre del Mar y en la que salió elegido presidente Mariano Matutes.

Desde entonces se han celebrado seis congresos (curiosamente nunca se celebró el III Congreso) y, de ellos, han salido elegidos cuatro presidentes distintos: Mariano Matutes (tres veces), Enrique Ramon Fajarnés (una), Joan Colomar (una) y José Juan Cardona (una).

Los más viejos del partido recuerdan que en las citas congresuales del partido siempre ha habido unión y consenso, y prueba de ello es que siempre se ha presentado una sola candidatura. Obviamente, el partido, que hasta 1996 no ocupó por primera vez la Moncloa pese a que el voto mayoritario en las Pitiüses y Balears siempre fue, salvo en 1999, conservador; también tuvo en casa sus malos momentos, como la grave crisis de la candidatura de las elecciones autonómicas y municipales de 1999 que provocó la dimisión del entonces presidente del partido, Joan Colomar Serra. Éste fue relevado por José Juan Cardona, a un año de la celebración del VII Congreso, donde luego, en octubre de 2000, fue reelegido con el apoyo del 98,5 por ciento de los afiliados.

Cardona iniciará el lunes su segundo mandato al frente del PP y, para ello, contará de nuevo con el presidente del Consell, Pere Palau, para que ocupe la secretaría general. No obstante, la persona que ha ocupado durante más tiempo la presidencia del partido ha sido Mariano Matutes. Ya encabezó en noviembre de 1987 la candidatura de la primera cita congresual de las Pitiüses. Luego, en 1990, en el II Congreso celebrado también en el Hotel Torre del Mar y cuya organización le costó al partido 400.000 pesetas, fue relevado por Enrique Ramon Fajarnés. Ese congreso se celebró poco después del X Congreso Nacional de Sevilla de refundación de AP en PP.

Resulta curioso que del II Congreso se pasara al IV, que, además, se celebró sólo un año después (23 de noviembre de 1991) del anterior. Mariano Matutes recuperó de nuevo el mando del partido y lo renovaría tres años después en la quinta cita congresual, celebrada el 23 de abril de 1994 en el hotel El Corso. Este congreso se celebró tras otra victoria nacional en las urnas del PSOE. Sin embargo, Matutes recordó en su discurso que el PP, una vez más, había sido la fuerza más votada en las Pitiüses. Ese año, en el que se registró un incremento de la masa social del partido en un 38%, se terminó la desalinizadora de Eivissa y, entre otras cosas se logró la paralización del cámping de Ca Marí, en Formentera.

El VI Congreso, en noviembre de 1996, fue quizá el más feliz de todos, por el hecho de que apenas unos meses antes José María Aznar había acabado con la hegemonía de Felipe González. También hubo cambios en la isla, con el cambio de Mariano Matutes por Joan Colomar. Éste obtuvo 228 votos a favor, 12 abstenciones y sólo cinco en contra. En su discurso de salida, Matutes dio prioridad a la política de medioambiente, pidiendo «una rectificación de errores del pasado». La grave división del partido antes de las elecciones de 1999 provocó la salida precipitada de Colomar y la entrada de Cardona, que fue quién, con el tiempo, devolvió el clima de tranquilidad al partido.