Miembros de la ponencia del Parlament de Catalunya, ayer.

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La ponencia parlamentaria redactora del Estatut aprobó ayer la proposición de ley de reforma estatutaria con los votos del tripartito pero con la abstención de CiU y el voto en contra del PP, una mayoría que, si se repite en la votación final en el pleno del Parlament, sería insuficiente para aprobar el texto.

Por su parte, el Partido Popular votó en contra al interpretar que el texto de 218 artículos -que ahora inicia un trámite de enmiendas, antes de ser aprobado por la Comisión Primera, el 29 de julio, y ser trasladado hacia septiembre al pleno del Parlament- contiene elementos inconstitucionales. CiU presentó ayer tarde tres votos particulares al texto actual redactado -sobre el blindaje de competencias, financiación y en favor del equilibrio territorial-, mientras que el Partido Popular presentó un voto particular de rechazo a la totalidad del texto.

CiU, cuyos votos serán imprescindibles para alcanzar la mayoría de dos tercios en el pleno de la cámara catalana, finalmente se abstuvo en la votación del primer borrador oficial del Estatut, dado su desacuerdo con dos aspectos del texto que considera fundamentales y en los que el tripartito ha impuesto su criterio: la financiación y el «blindaje» de las competencias de la Generalitat.

También el tripartito presenta sus propios votos particulares: PSC e ICV-EUiA se centran especialmente en reclamar mayor reconocimiento de la autonomía municipal, mientras que ERC emite un voto particular para justificar su posición favorable respecto al actual texto.

Poco más de cuarenta minutos necesitaron los ponentes del Estatut para aprobar el primer borrador formal del nuevo texto.