Rajoy, que defendió la independencia del equipo gestor de La Caixa,
advirtió que «nos preocupamos por que no se desande el camino que a
lo largo de los ocho años que estuvimos en el Gobierno recorrimos
para que los españoles tuvieran energía más barata, a través de la
privatización de los operadores y la promoción de la competencia
entre esos operadores».
«Desechen de inmediato la idea de que los recelos se deben al
origen catalán de la misma (la OPA); si ésta fuera la causa,
difícilmente podría explicarse, por ejemplo, que La Caixa sea hoy
la primera caja de ahorros de Andalucía», afirmó, en presencia del
presidente de la caja de ahorros, Ricard Fornesa, y de numerosos
empresarios.
Por su parte, Ricard Fornesa expresó a Mariano Rajoy la
inquietud de la primera caja española ante las críticas que ha
expresado el PP por la OPA de Gas Natural. «Nos inquieta la actitud
del PP porque parece que se ha llegado a la conclusión de que
alguien está controlando La Caixa», lamentó Fornesa.
Mientras, el máximo accionista de Endesa, Caja Madrid (9 por
ciento del capital), decidió ayer por la tarde de forma
consensuada, tras reunión ordinaria de su consejo de
administración, no pronunciarse sobre la OPA hasta que no se
apruebe oficialmente y tenga en su poder todos los informes
pertinentes.
El consejo de la caja madrileña se reunía ayer por primera vez
desde que Gas Natural anunció sus intenciones, por lo que era la
primera ocasión en que se podía debatir la operación en el máximo
órgano de administración de la entidad financiera, pese a que este
asunto no estaba incluido en el orden del día.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo
que el Ejecutivo velará por la competencia en la oferta de compra
de Gas Natural sobre Endesa, mientras que el consejero delegado de
la eléctrica, Rafael Miranda, dijo que «hay muchas vías y muchas
batallas» en este proceso.
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