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EFE/EUROPA PRESS-GRANADA
El líder del PP, Mariano Rajoy, dijo ayer que no aceptará la actitud «antidemocrática» del Gobierno de pretender «cambiar lo que es España» excluyendo a ese partido, porque el PSOE «no tiene ningún mandato» para ello, y advirtió al presidente de que cometería su «mayor error» de seguir en esa línea. Rajoy, que participó ayer en una copa navideña organizada por el partido en Granada, consideró «inconcebible» que se esté pactando «la idea de España» con IU de Catalunya o ERC «dejando fuera al PP», y por consiguiente, «como mínimo a la mitad de los españoles» a los que dice representar su partido.

«No se puede pactar lo que es España con algunos partidos políticos que no creen en España», enfatizó Rajoy, quien manifestó su disposición al diálogo «pero en serio y para defender los intereses de los españoles». Respecto a la oferta de pacto sobre la reforma del Estatut de Catalunya lanzada el martes pasado al presidente del Gobierno, Rajoy dijo estar esperando una respuesta y sostuvo que se trata de un ofrecimiento «creíble», a diferencia de lo manifestado por el PSOE, partido que tiene, dijo, un «sentido democrático muy disminuido».

En conferencia de prensa, se refirió al encuentro que representantes del Gobierno, del PSOE y de los cuatro partidos catalanes que aprobaron la reforma del Estatut de Catalunya mantuvieron ayer en el Parlamento catalán para argumentar la actitud «claramente antidemocrática» del Ejecutivo, con reuniones «cuyo contenido no conoce nadie» y que en ocasiones son «clandestinas». Rajoy obvió que el PP puso todo su empeño en evitar el debate sobre el Estatut, intentando frenar su tramitación parlamentaria.

En su opinión, en el proyecto de reforma del Estatut el presidente del Gobierno ha cambiado de postura en cuestiones como afirmar «primero que votaría cualquier cosa que aprobara el Parlament de Catalunya y después promovió que se votara el Estatuto en Catalunya» porque «se ha dado cuenta de que se han hecho cosas muy mal hechas». Rajoy, subrayó que el PSOE aprobó el proyecto estatutario catalán en el Parlament y ahora, sin embargo, quiere enmendarlo «de arriba a abajo». Con ironía, dijo sentirse «reconfortado» por este cambio de actitud de los socialistas y recordó que durante meses se ha estado diciendo que el PP estaba «solo» en sus tesis de desacuerdo con la propuesta remitida desde Catalunya.