Por su parte, el secretario general de ERC, Joan Puigcercós, calificó ayer de «escenificación electoralista» la reunión secreta que mantuvieron el pasado lunes miembros del Gobierno y del PSC para abordar el cumplimiento del Estatut en los Presupuestos Generales de 2007.
«Hay muchas necesidades de infraestructuras en Cataluña y hay que abordarlas con un criterio institucional y no sólo en el contexto de una campaña electoral para que se aproveche de ello una determinada fuerza política», señaló Piqué en declaraciones a los periodistas durante una visita a las fiestas de L'Hospitalet (Barcelona).
El líder popular ha asegurado que Catalunya fue mucho «mejor tratada» en cuanto a inversiones del Estado en materia de infraestructuras durante los dos legislaturas en que gobernó el Partido Popular y, en particular, en la que lo hizo con mayoría absoluta. «Antes, con el señor Felipe González, y ahora, con José Luis Rodríguez Zapatero, Cataluña ha salido peor parada, por lo que su credibilidad (en referencia a los socialistas) en este tema está por ver», ha manifestado Piqué.
En un comunicado del partido republicano, Puigcercós afirma además que este acuerdo sobre presupuestos para Cataluña pactado entre PSC-PSOE «llega dos años tarde».
A juicio del dirigente de Esquerra, «estamos asistiendo a una gran comedia en la que Montilla parece el gran baluarte de los presupuestos, aunque ya sabemos que las cuentas del Estado están aprobadas porque después del uno de noviembre CiU votará a favor». En este sentido, añade que CiU «no tiene ninguna otra opción (ante los presupuestos de 2007) tras el pacto Mas-Zapatero».
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