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C. AGUSTÍN/ N.DOMBLÀS.
Concentrar a más de dos mil personas vestidas de gala en un parque de tecnologías ambientales para presentar la nueva Televisió de Mallorca es, sin duda, una apuesta arriesgada. Esos eran los comentarios iniciales entre la gente, pero la espectacular puesta en escena y la dinámica del encuentro dio una noche excepcional.

Varios espectáculos se entrelazaban con información sobre la cadena que aparecía en la pantalla más grande de Europa (16 metros de ancho por nueve metros de alto).

Fueron los pilotos del Equipo Europeo Paramotor los que al instante nos transportaron a un mundo mágico, una sensación que fue como entrar en una película de Harry Potter, más que nada por la música, entre fascinante y llena de suspense. Poco después llegó una pareja de artistas franceses que bailaron el imposible por las paredes del edificio del Parc de Tecnologies Ambientals. Un baile vertical apoyándose en las vigas metálicas, que era algo así como «El salt de la bella dona» o «Speaderman».

Finalmente, el número acrobático del Àngel de la Luna, por cierto, ayer casi llena, aunque ya menguante. En este número, una joven, vestida como Campanilla en Peter Pan, colgaba suspendida de un globo de helio gigante de 6,6 de diámetro, saludando.

En la república independiente de la imaginación, algunos de los que debieron experimentar estas u otras emociones fueron, entre muchos otros, por parte del CIM, Maria Antònia Munar, por cierto con un traje espléndido; Miquel Nadal, Dolça Mulet, Bartomeu Vicens, Francesc Buils o Miquel Àngel Flaquer. Desde luego estaba Antoni Moragues, director de la nueva cadena, que ya ha contratado a Madó Pereta, algo que sin duda indica que este caballero no le guarda rencor por la pasada cena de Navidad de UM, cuando Pereta le vistió de «boy».