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EFE-SEVILLA
El presidente del PCE, Felipe Alcaraz, presentó ayer en la fiscalía de Sevilla una denuncia por crímenes de guerra contra el ex presidente del Gobierno José María Aznar por declarar la guerra de Irak y causar la muerte a casi 700.000 iraquíes.

La denuncia será presentada en los próximos días en otras fiscalías de España, y el PCE confía en que los respectivos fiscales jefes informen positivamente de la denuncia, el fiscal general convoque la Sala de Fiscales y, a continuación, eleve el caso al Tribunal Internacional.

Alcaraz dijo a los periodistas que los 654.000 muertos registrados desde 2003, en su mayoría civiles, son pruebas suficientes de que se trata de una guerra «totalmente ilegal y fuera del paraguas de la ONU».

La presentación de la querella «no es un acto testimonial», dijo Alcaraz, porque esa cifra de muertos «es materia suficiente para iniciar un procedimiento ante el Tribunal Penal Internacional».

Según Alcaraz, la guerra desencadenada por Bush, Blair y Aznar «fue absolutamente ilegal, injusta e inmoral, y alguien tiene que responder políticamente». El dirigente comunista añadió que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, «ya hizo un gesto simbólico importante al retirar las tropas españolas de Irak, pero no quiere ir más allá», lo que supondría retirar también las tropas españolas de Afganistán.

El secretario político del PCA en Sevilla, Juan de Dios Villanueva, recordó que el lunes se cumplió el treinta aniversario de la legalización del PCE y «no queremos que sea como una visita al museo, sino una manera activa de poner en práctica la lucha por la paz y los principios fundamentales de nuestra política».